26 Agosto 2013
SANTIAGO DE CHILE.- Las palabras "golpe" y "dictadura" todavía encuentran a la mayoría de los chilenos divididos en dos bandos casi irreconciliables a casi cuarenta años de la irrupción violenta de los militares que terminó con una de las democracias más estables de la región. A sólo días de que se cumpla un nuevo aniversario de la intervención castrense, que encabezó el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973, es tema obligado y que no deja indiferente a nadie, más aún cuando a casi fines de este año se deben celebrar elecciones presidenciales y parlamentarias.
Partidarios acérrimos del régimen sostienen que lo de Pinochet, quien dijo una vez que Dios lo puso en el poder, fue un "pronunciamiento militar" para impedir que el gobierno de la Unidad Popular del presidente Salvador Allende (1970-1973) llevara al país a una dictadura como la de Cuba.
Sin embargo, en el último tiempo han aparecido algunas voces de quienes colaboraron con el régimen y han aclarado que el gobierno de Pinochet fue una dictadura producto de un golpe militar. "Sin lugar a dudas, (la de Pinochet) fue una dictadura, no fue una democracia, y del punto de vista de la ciencia política, lo que no es democracia es un gobierno de facto", dijo a "La Tercera", el senador Hernán Larraín. Sorprendió con sus declaraciones, ya que pertenece a la Unión Demócrata Independiente (UDI), la colectividad derechista que colaboró más estrechamente con la dictadura que se prolongó por casi 17 años (1973-1990).
El reconocimiento de Larraín sobre lo que fue el régimen castrense no es el mayoritario en su sector, ya que todavía hay muchos que sostienen que la de Pinochet no fue una "dictadura" ni menos un "golpe" la intervención militar de hace cuarenta años.
El tema no ha sido superado. Más todavía cuando el 17 de noviembre de este año se realicen las elecciones presidenciales, en las que se enfrentarán Michelle Bachelet (Nueva Mayoría) y Evelyn Matthei (Alianza por Chile).
Ambas representan de algún modo lo que fue el Chile de hace 40 años. Las dos son hijas de generales de la fuerza aérea, Alberto Bachelet y Fernando Matthei. El primero fue un general leal y que colaboró con Allende, mientras que Matthei, llegó a integrar la Junta Militar de Pinochet. (DPA)
Partidarios acérrimos del régimen sostienen que lo de Pinochet, quien dijo una vez que Dios lo puso en el poder, fue un "pronunciamiento militar" para impedir que el gobierno de la Unidad Popular del presidente Salvador Allende (1970-1973) llevara al país a una dictadura como la de Cuba.
Sin embargo, en el último tiempo han aparecido algunas voces de quienes colaboraron con el régimen y han aclarado que el gobierno de Pinochet fue una dictadura producto de un golpe militar. "Sin lugar a dudas, (la de Pinochet) fue una dictadura, no fue una democracia, y del punto de vista de la ciencia política, lo que no es democracia es un gobierno de facto", dijo a "La Tercera", el senador Hernán Larraín. Sorprendió con sus declaraciones, ya que pertenece a la Unión Demócrata Independiente (UDI), la colectividad derechista que colaboró más estrechamente con la dictadura que se prolongó por casi 17 años (1973-1990).
El reconocimiento de Larraín sobre lo que fue el régimen castrense no es el mayoritario en su sector, ya que todavía hay muchos que sostienen que la de Pinochet no fue una "dictadura" ni menos un "golpe" la intervención militar de hace cuarenta años.
El tema no ha sido superado. Más todavía cuando el 17 de noviembre de este año se realicen las elecciones presidenciales, en las que se enfrentarán Michelle Bachelet (Nueva Mayoría) y Evelyn Matthei (Alianza por Chile).
Ambas representan de algún modo lo que fue el Chile de hace 40 años. Las dos son hijas de generales de la fuerza aérea, Alberto Bachelet y Fernando Matthei. El primero fue un general leal y que colaboró con Allende, mientras que Matthei, llegó a integrar la Junta Militar de Pinochet. (DPA)
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