Por Alberto Núñez
06 Septiembre 2013
ESTA VEZ NO. Campazzo anotó 10 puntos, pero no pudo desplegar todo su juego.
CARACAS (enviado especial).- Si Argentina se presenta a un partido con todas sus figuras (las NBA y las europeas), ninguna derrota podría tener un buena conclusión posterior. A menos que juegue con Estados Unidos o España, claro está. Sin embargo, la Argentina que perdió ayer contra Puerto Rico por 94-80 puede quedarse tranquila, al menos por ahora.
Con Luis Scola, la solitaria estrella, a la cabeza, el seleccionado enfrentó a un equipo que venía invicto y que trajo a todos sus referentes. Y por si esto no fuera poco para quedarse conformes con el rendimiento nacional, el nivel del primer tiempo fue bastante bueno.
Un parcial de 17-2 abrió el partido a favor de los de Julio Lamas. El 23-14 al final del primer cuarto no hablaba a las claras de lo que había pasado en la cancha: Argentina había superado en todos los aspectos al principal candidato pero no había podido plasmarlo.
Mucho menos en el segundo cuarto, que perdió por 30-26 para dejar un 49-44 que maquillaba en exceso lo hecho por uno y otro equipo. La segunda mitad, sería totalmente diferente. Puerto Rico pareció despertar de la siesta y a fuerza de triples y potencia física, empezó a recuperar terreno.
El armado de Carlos Arroyo (17 puntos y cinco asistencias) y el poderío ofensivo de Renaldo Balkman (23 puntos) fue fundamental para el triunfo final. Sobre el final del tercer cuarto, la diferencia que en un momento fue argentina, ahora era de los centroamericanos y por 10 tantos. Sin embargo, Argentina no se daría por vencida.
Promediando el último cuarto, un doble de Juan Fernández puso a los suyos a tres de los puertorriqueños (67-70) pero todo quedaría ahí. Los ganadores cerraron con un parcial de 24-13 que acabaría cualquier aspiración.
La derrota no preocupa tanto porque el Mundial sigue estando cerca: Argentina enfrentará hoy a Jamaica a las 12.30 y mañana a Uruguay a las 15. Dos rivales accesibles y, si los derrota, será casi un hecho que clasificará a España 2014.
Con Luis Scola, la solitaria estrella, a la cabeza, el seleccionado enfrentó a un equipo que venía invicto y que trajo a todos sus referentes. Y por si esto no fuera poco para quedarse conformes con el rendimiento nacional, el nivel del primer tiempo fue bastante bueno.
Un parcial de 17-2 abrió el partido a favor de los de Julio Lamas. El 23-14 al final del primer cuarto no hablaba a las claras de lo que había pasado en la cancha: Argentina había superado en todos los aspectos al principal candidato pero no había podido plasmarlo.
Mucho menos en el segundo cuarto, que perdió por 30-26 para dejar un 49-44 que maquillaba en exceso lo hecho por uno y otro equipo. La segunda mitad, sería totalmente diferente. Puerto Rico pareció despertar de la siesta y a fuerza de triples y potencia física, empezó a recuperar terreno.
El armado de Carlos Arroyo (17 puntos y cinco asistencias) y el poderío ofensivo de Renaldo Balkman (23 puntos) fue fundamental para el triunfo final. Sobre el final del tercer cuarto, la diferencia que en un momento fue argentina, ahora era de los centroamericanos y por 10 tantos. Sin embargo, Argentina no se daría por vencida.
Promediando el último cuarto, un doble de Juan Fernández puso a los suyos a tres de los puertorriqueños (67-70) pero todo quedaría ahí. Los ganadores cerraron con un parcial de 24-13 que acabaría cualquier aspiración.
La derrota no preocupa tanto porque el Mundial sigue estando cerca: Argentina enfrentará hoy a Jamaica a las 12.30 y mañana a Uruguay a las 15. Dos rivales accesibles y, si los derrota, será casi un hecho que clasificará a España 2014.
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