03 Marzo 2014
Es llamativo, pero no fueron muchas las películas que Hollywood le dedicó al tema de la esclavitud. Menos con la profundidad y la crudeza alcanzadas por el filme de Steve McQueen. Era una deuda pendiente y la Academia la saldó con el Oscar a “12 años de esclavitud”, la dramática historia de Salomon Northup, un negro nacido libre que es raptado y vendido a una plantación del sur de Estados Unidos.
Otros elementos que llaman la atención sobre “12 años de esclavitud” -no estrenada en Tucumán- es que el director y el protagonista (Chiwetel Ejiofor) son ingleses, y que el principal rol femenino fue cubierto por una mexicana (Lupita Nyong’o).
El premio mayor era un mano a mano entre “12 años de esclavitud” y “Gravedad”, extraordinaria producción de ciencia ficción que terminó obteniendo siete Oscar, entre ellos al Mejor Director, Alfonso Cuarón (foto). El realizador mexicano conquistó dos estatuillas, ya que también se había encargado de la edición de la película, junto a Mark Sanger. Otro mexicano se fue a casa con un Oscar: el director de fotografía Emmanuel Luzbeki.
Will Smith fue el encargado de anunciar el Oscar a la Mejor Película, galardón para que el estaban postuladas nueve producciones. McQueen tomó la palabra a la hora de los agradecimientos. Lo había hecho cuando su filme se alzó con el Globo de Oro, en enero pasado. McQueen efectuó una dedicatoria especial a las 21 millones de personas que padecen la esclavitud hoy en día en el mundo.
“12 años de esclavitud” se rodó con un presupuesto de 20 millones de dólares y lleva recaudados casi 50 millones (sólo en Estados Unidos y Canadá). Está claro que esos números se dispararán. Se trata de una coproducción entre varias firmas, entre las que aparece Plan B, el ascendente sello que comanda Brad Pitt (quien se reservó un papel en el filme).
Una de las preguntas previas a la ceremonia era si los estudios Disney conquistarían -finalmente- el Oscar a la Mejor Película Animada. Lo lograron de la mano de la imparable “Frozen” y, como en los viejos tiempos, también se impusieron en el apartado Mejor Canción Original. “Let it go” doblegó a pesos pesados como U2, Pharrell Williams y Karen O. No caben dudas de que el peso de la industria sigue siendo determinante.