21 Julio 2014
LA PAZ.- Bolivia se convirtió en el único país en el mundo que “excepcionalmente” autoriza el trabajo infantil desde los 10 años de edad, una tendencia contraria al resto de la región, que hace esfuerzos para eliminar el trabajo de menores. La “excepción” está contenida en el Código Niño, Niña, Adolescente que acaba de ser promulgado por el vicepresidente boliviano Álvaro García Linera. El funcionario aseguró que la nueva normativa establece “un equilibrio” entre los convenios internacionales y la realidad boliviana.
Según el texto de la norma, los pequeños podrán trabajar desde los 10 años únicamente en tareas de “cuenta propia”, es decir, nunca para un empleador y siempre que cuenten con la autorización de las Defensorías de la Niñez, instancias dependientes de las alcaldías.
La representante de la Defensoría del Pueblo de La Paz, Teófila Guarachi, sostuvo que ni el Estado ni las más de 300 municipalidades, existentes en país tienen las capacidades materiales y profesionales para ejercer el control orientado, según el Código, a evitar la explotación infantil.
“En conjunto, tenemos una buena ley que protege al niño y a la niña, que articula los sistemas dispersos del Estado, que reconoce derechos y convierte a los niños, niñas y adolescentes en sujetos participantes de sus derechos”, afirmó García Linera.
Bolivia había ratificado un convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que fija la edad mínima laboral en 14 años, entre otras normativas internacionales que obligan a erradicar las peores formas de explotación, entre ellas la zafra y la minería. Según la OIT, en América latina y el Caribe unos 13 millones de niños forman parte del mercado laboral. En Bolivia sumaron 850.000 pequeños trabajadores en 2008, una cifra que será actualizada este año.
El Código, que reemplazará una ley anterior que estuvo vigente durante 15 años, obliga a los empleadores a reconocer todas las prestaciones laborales, sociales y políticas de los niños trabajadores desde los 14 años de edad y fija en seis horas la jornada laboral para los obreros de entre 14 y 17 años de edad. La organización Human Rights Watch (HRW) condenó la nueva ley y destacó que con esta medida Bolivia se convierte en el único país del mundo que autoriza el empleo de niños de tan corta edad.
Según el texto de la norma, los pequeños podrán trabajar desde los 10 años únicamente en tareas de “cuenta propia”, es decir, nunca para un empleador y siempre que cuenten con la autorización de las Defensorías de la Niñez, instancias dependientes de las alcaldías.
La representante de la Defensoría del Pueblo de La Paz, Teófila Guarachi, sostuvo que ni el Estado ni las más de 300 municipalidades, existentes en país tienen las capacidades materiales y profesionales para ejercer el control orientado, según el Código, a evitar la explotación infantil.
“En conjunto, tenemos una buena ley que protege al niño y a la niña, que articula los sistemas dispersos del Estado, que reconoce derechos y convierte a los niños, niñas y adolescentes en sujetos participantes de sus derechos”, afirmó García Linera.
Bolivia había ratificado un convenio de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que fija la edad mínima laboral en 14 años, entre otras normativas internacionales que obligan a erradicar las peores formas de explotación, entre ellas la zafra y la minería. Según la OIT, en América latina y el Caribe unos 13 millones de niños forman parte del mercado laboral. En Bolivia sumaron 850.000 pequeños trabajadores en 2008, una cifra que será actualizada este año.
El Código, que reemplazará una ley anterior que estuvo vigente durante 15 años, obliga a los empleadores a reconocer todas las prestaciones laborales, sociales y políticas de los niños trabajadores desde los 14 años de edad y fija en seis horas la jornada laboral para los obreros de entre 14 y 17 años de edad. La organización Human Rights Watch (HRW) condenó la nueva ley y destacó que con esta medida Bolivia se convierte en el único país del mundo que autoriza el empleo de niños de tan corta edad.