Una de las familias se constituyó como querellante en la causa

Primero fueron tres las chicas que concurrieron a hacer la denuncia por presunto abuso sexual. Al poco tiempo, una de ellas, menor de edad, desistió de iniciar acciones penales luego de consultar con su mamá que la esperaba en Tucumán. Finalmente, las denunciantes fueron dos, pero solo una de ellas se constituyó como querellante y designó un abogado radicado en Bariloche para impulsar la causa.

Todo sucedió en tiempo récord. En dos días se recibieron las declaraciones de las denunciantes (una de ellas lo hizo en Cámara Gesell por ser menor de edad), se individualizó a los imputados e incluso se realizaron rondas de reconocimiento. “Las primeras diligencias se hicieron muy rápidamente, sabiendo que tanto los denunciantes como los imputados son de Tucumán y estaban próximos a regresar a esa ciudad. Es un proceso que está recién iniciado y que seguirá su curso en Bariloche”, informó ayer, en diálogo telefónico con LA GACETA, el fiscal Edgardo Fernández, quien fue el encargado de reunir las primeras pruebas que integran la causa. “Realmente este hecho causó mucha conmoción en Bariloche y desde la Unidad Fiscal de Atención Primaria, que se dedica a los delitos contra las personas, tomamos medidas de inmediato”, agregó.

Según el fiscal, los dos adolescentes imputados alegaron que estaban en estado de ebriedad aquella madrugada. Además, informó que los registros de las cámaras de seguridad del hotel Patagonia están en manos del juzgado, aunque él no pudo verlas aún. Según fuentes que tuvieron acceso a las filmaciones, los videos muestran claramente que los jóvenes se sostenían en las paredes de los pasillos para no caerse.

“Hablamos de abuso sexual simple, no de violación, porque no hubo acceso carnal. Una de las chicas manifestó que la besaron en la mejilla y también se mencionó que hubo un tocamiento, pero es algo que se debe probar”, advirtió Fernández y contó que una de las familias designó al abogado Raúl Ochoa, domiciliado en esa ciudad rionegrina, como querellante de la causa. “Al constituirse como querellantes significa que pueden aportar pruebas”, explicó.

A pesar de que Bariloche es la ciudad por excelencia para los viajes de egresados, Fernandez se sorprendió ante el hecho que se denunció. “No recuerdo haber tenido en la fiscalía un caso semejante. A pesar de que esta ciudad recibe miles y miles de jóvenes en el viaje de fin de curso, no hemos tenido denuncias por hechos de violencia ni tampoco de esta índole”, afirmó.