26 Septiembre 2014
Martina, de ocho años, está ansiosa. Sabe que en una de las oficinas de la escuela hay algo que seguramente le cambiará su forma de aprender. Son las netbooks de un aula virtual que han llegado a uno de los establecimientos más vulnerables de La Perla del Sur: la escuela del barrio Primero de Mayo II. Pero antes de empezar a usar esta valiosa herramienta, las autoridades tienen una preocupación: mejorar la seguridad de una institución que sufre el ataque permanente de los vándalos.
Desde que comenzó a funcionar el año pasado, el establecimiento ha sido blanco de los delincuentes. Antes de ser inaugurada, ya le habían roto la cerca perimetral, se llevaron el portón metálico y robaron los cables que transportan electricidad al motor del pozo de agua, dejando sin líquido la escuela. Además, les sacaron dos veces los elementos que componen los tableros eléctricos y dejaron las aulas a oscuras. En los primeros meses, la escuela tuvo un sereno. Hasta que fue atacado por una patota. Lo golpearon para robarle la moto y nadie quiso reemplazarlo.
La noticia, esta vez, debería ser muy buena. “Y lo es. Que se hayan acordado de darle el aula virtual a esa escuela es algo maravilloso, porque los chicos realmente lo necesitan. Pero estoy preocupado. En ese establecimiento no dura nada. Nosotros ayudamos: reponemos electricidad y otros elementos y enseguida los vuelven a robar”, señaló el intendente Osvaldo Morelli.
La directora de la escuela, Silvia Romero, detalló que el Aula Digital Móvil que recibieron consiste en una unidad de equipamiento que incluye 30 netbooks, un servidor pedagógico, una unidad de alimentación, un router inalámbrico para trabajar en red, un proyector, una cámara de fotos, una impresora, pendrives, y un carro de guarda, carga y transporte.
Aunque algunos padres de alumnos remarcaron que este equipamiento no se estaba usando porque en la escuela tenían miedo que se los roben, Romero negó esa versión. “Por ahora, estamos capacitando a los docentes que usarán esta tecnología. Además, aún tienen que venir a hacer la instalación del aula virtual”, especificó.
No obstante, reconoció que ya tuvo una reunión con el personal de la Dirección de Construcciones Escolares del Ministerio de Educación, a quien le solicitó reforzar la seguridad del aula donde quedarán guardadas las netbooks y el resto de los equipos.
“Quiero aclarar que en esta escuela las clases se dictan sin problemas. Los inconvenientes aparecen los fines de semana o durante las noches, cuando no hay nadie”, resaltó la directora.
A la escuela del barrio Primero de Mayo II asisten 174 alumnos. Funciona sólo por la mañana y tiene únicamente nivel primario. A la tarde, el municipio dicta allí distintos talleres de capacitación.
El establecimiento es nuevo: tiene seis años. Es un edificio amplio y moderno. Fue construido mientras se levantaban las casas del barrio. Las viviendas se hicieron en el marco del Programa de Mejoramiento Habitacional de la Nación (Promeba) con el objetivo de instalar allí a las familias que vivían en la costanera del río Gastona y que constantemente sufrían inundaciones cuando el cauce desbordaba.
El barrio, ubicado al este de la ciudad de Concepción, se ha vuelto muy inseguro en los últimos tiempos. Tanto que, según cuentan los mismos vecinos, muchos vendieron sus casas y se marcharon.
“No quedó nada en la escuela, sólo los pupitres. Es una pena, porque estaba nuevita”, detalla María Inés, la mamá de Martina. Señala las ventanas, con sus vidrios rotos, y los daños en toda la cerca perimetral. “Aquí de noche ya no podés salir. No se entiende que esto pase a menos de 100 metros de una seccional de la Policía Vial”, añade la mujer.
Ella, junto a otra mamá, Luciana Vargas, que tiene dos hijos que asisten al establecimiento, también se mostraron afligidas por el tema del aula virtual. “Nuestros hijos nunca vieron una computadora. Sería una pena que no las puedan usar porque se las roban”, dijeron.
Propuesta
El intendente Morelli sostuvo que la inseguridad golpea a varias escuelas de Concepción. “Habría que hacer un trabajo conjunto entre el Ministerio de Educación, el municipio y los mismos padres de alumnos con el objetivo de resguardar estos espacios públicos que son los establecimientos. Ya tuvimos buenas experiencias colocando alarmas en escuelas”, adelantó.
Desde que comenzó a funcionar el año pasado, el establecimiento ha sido blanco de los delincuentes. Antes de ser inaugurada, ya le habían roto la cerca perimetral, se llevaron el portón metálico y robaron los cables que transportan electricidad al motor del pozo de agua, dejando sin líquido la escuela. Además, les sacaron dos veces los elementos que componen los tableros eléctricos y dejaron las aulas a oscuras. En los primeros meses, la escuela tuvo un sereno. Hasta que fue atacado por una patota. Lo golpearon para robarle la moto y nadie quiso reemplazarlo.
La noticia, esta vez, debería ser muy buena. “Y lo es. Que se hayan acordado de darle el aula virtual a esa escuela es algo maravilloso, porque los chicos realmente lo necesitan. Pero estoy preocupado. En ese establecimiento no dura nada. Nosotros ayudamos: reponemos electricidad y otros elementos y enseguida los vuelven a robar”, señaló el intendente Osvaldo Morelli.
La directora de la escuela, Silvia Romero, detalló que el Aula Digital Móvil que recibieron consiste en una unidad de equipamiento que incluye 30 netbooks, un servidor pedagógico, una unidad de alimentación, un router inalámbrico para trabajar en red, un proyector, una cámara de fotos, una impresora, pendrives, y un carro de guarda, carga y transporte.
Aunque algunos padres de alumnos remarcaron que este equipamiento no se estaba usando porque en la escuela tenían miedo que se los roben, Romero negó esa versión. “Por ahora, estamos capacitando a los docentes que usarán esta tecnología. Además, aún tienen que venir a hacer la instalación del aula virtual”, especificó.
No obstante, reconoció que ya tuvo una reunión con el personal de la Dirección de Construcciones Escolares del Ministerio de Educación, a quien le solicitó reforzar la seguridad del aula donde quedarán guardadas las netbooks y el resto de los equipos.
“Quiero aclarar que en esta escuela las clases se dictan sin problemas. Los inconvenientes aparecen los fines de semana o durante las noches, cuando no hay nadie”, resaltó la directora.
A la escuela del barrio Primero de Mayo II asisten 174 alumnos. Funciona sólo por la mañana y tiene únicamente nivel primario. A la tarde, el municipio dicta allí distintos talleres de capacitación.
El establecimiento es nuevo: tiene seis años. Es un edificio amplio y moderno. Fue construido mientras se levantaban las casas del barrio. Las viviendas se hicieron en el marco del Programa de Mejoramiento Habitacional de la Nación (Promeba) con el objetivo de instalar allí a las familias que vivían en la costanera del río Gastona y que constantemente sufrían inundaciones cuando el cauce desbordaba.
El barrio, ubicado al este de la ciudad de Concepción, se ha vuelto muy inseguro en los últimos tiempos. Tanto que, según cuentan los mismos vecinos, muchos vendieron sus casas y se marcharon.
“No quedó nada en la escuela, sólo los pupitres. Es una pena, porque estaba nuevita”, detalla María Inés, la mamá de Martina. Señala las ventanas, con sus vidrios rotos, y los daños en toda la cerca perimetral. “Aquí de noche ya no podés salir. No se entiende que esto pase a menos de 100 metros de una seccional de la Policía Vial”, añade la mujer.
Ella, junto a otra mamá, Luciana Vargas, que tiene dos hijos que asisten al establecimiento, también se mostraron afligidas por el tema del aula virtual. “Nuestros hijos nunca vieron una computadora. Sería una pena que no las puedan usar porque se las roban”, dijeron.
Propuesta
El intendente Morelli sostuvo que la inseguridad golpea a varias escuelas de Concepción. “Habría que hacer un trabajo conjunto entre el Ministerio de Educación, el municipio y los mismos padres de alumnos con el objetivo de resguardar estos espacios públicos que son los establecimientos. Ya tuvimos buenas experiencias colocando alarmas en escuelas”, adelantó.