26 Diciembre 2014
EXPANSIÓN. El Banco Central persistirá en la emisión monetaria para financiar al Tesoro, advirtió el reporte. reuters
BUENOS AIRES.- La actividad económica cerraría este año con una retracción del 2%, según estimó un informe de la Fundación Mediterránea. La entidad planteó que el nivel de las reservas en dólares del Banco Central y el déficit fiscal condicionan la economía de 2015. Señaló que la escasa competitividad y la creciente desconfianza ante los desequilibrios económicos frenan la inversión y la compra de bienes durables.
“Estos factores, sumados a la licuación salarial, provocaron que el Producto Bruto Interno (PBI) baje el 2% este año, cuando en 2013 había aumentado el 2,9%”, advirtió la entidad.
Según el análisis, este retroceso de la actividad “refleja que la economía ingresó en una nueva dinámica, con mayor incidencia del impuesto inflacionario y en la que la falta de confianza y la pérdida de competitividad erosionan los motores del crecimiento”. “En el cierre de 2014 se observa mayor tranquilidad en materia financiera, aunque con un balance sumamente negativo en la economía real, donde sólo el sector agropecuario no mostraría números rojos (gracias a la buena cosecha y a los altos precios de los granos en la primera parte del año). La mayor caída se detecta en el consumo de bienes durables como autos, electrodomésticos y maquinaria agrícola”, argumentó el informe.
La Fundación Mediterránea alertó que el resultado financiero del sector público sería negativo este año en $ 216.000 millones. “El rojo en las cuentas públicas ascendería a $ 315.000 millones para 2015”, subrayó. Además, calculó que la emisión monetaria del Banco Central, necesaria para financiar al sector público, cerrará este año en $ 150.000 millones.
Con miras a 2015, el informe evaluó que el tipo de cambio (la relación del peso con el dólar) seguirá levemente por detrás de la inflación. “No incitará la suba de precios pero, a la vez, no se atrasará demasiado, pues podría afectar el empleo y la entrada de dólares por exportaciones”, subrayó. Sin embargo, los especialistas de la Fundación Mediterránea advirtieron que el control del tipo de cambio dependerá, en gran medida, del nivel de las reservas del Banco Central. “Estas pueden abastecerse por dos vías, una más genuina (exportaciones, inversión extranjera, endeudamiento internacional a largo plazo) y otra menos genuina (endeudamiento internacional y adelantos de exportadores)”, recalcaron.
Por último, el informe privado indicó que las posibilidades de que el Gobierno nacional resuelva los actuales problemas de la economía requieren de credibilidad, de una visión diferente y, posiblemente, de soportar costos políticos iniciales. El organismo consideró que “el Gobierno no tiene ni quiere nada de esto en su último año”. “De este modo, lo más probable es que intente lograr un nuevo puente hasta 2015, para que la próxima gestión resuelva los grandes desafíos. Ese puente son los dólares para las reservas. De esto dependerá el nivel de actividad de 2015”, concluyó.
“Estos factores, sumados a la licuación salarial, provocaron que el Producto Bruto Interno (PBI) baje el 2% este año, cuando en 2013 había aumentado el 2,9%”, advirtió la entidad.
Según el análisis, este retroceso de la actividad “refleja que la economía ingresó en una nueva dinámica, con mayor incidencia del impuesto inflacionario y en la que la falta de confianza y la pérdida de competitividad erosionan los motores del crecimiento”. “En el cierre de 2014 se observa mayor tranquilidad en materia financiera, aunque con un balance sumamente negativo en la economía real, donde sólo el sector agropecuario no mostraría números rojos (gracias a la buena cosecha y a los altos precios de los granos en la primera parte del año). La mayor caída se detecta en el consumo de bienes durables como autos, electrodomésticos y maquinaria agrícola”, argumentó el informe.
La Fundación Mediterránea alertó que el resultado financiero del sector público sería negativo este año en $ 216.000 millones. “El rojo en las cuentas públicas ascendería a $ 315.000 millones para 2015”, subrayó. Además, calculó que la emisión monetaria del Banco Central, necesaria para financiar al sector público, cerrará este año en $ 150.000 millones.
Con miras a 2015, el informe evaluó que el tipo de cambio (la relación del peso con el dólar) seguirá levemente por detrás de la inflación. “No incitará la suba de precios pero, a la vez, no se atrasará demasiado, pues podría afectar el empleo y la entrada de dólares por exportaciones”, subrayó. Sin embargo, los especialistas de la Fundación Mediterránea advirtieron que el control del tipo de cambio dependerá, en gran medida, del nivel de las reservas del Banco Central. “Estas pueden abastecerse por dos vías, una más genuina (exportaciones, inversión extranjera, endeudamiento internacional a largo plazo) y otra menos genuina (endeudamiento internacional y adelantos de exportadores)”, recalcaron.
Por último, el informe privado indicó que las posibilidades de que el Gobierno nacional resuelva los actuales problemas de la economía requieren de credibilidad, de una visión diferente y, posiblemente, de soportar costos políticos iniciales. El organismo consideró que “el Gobierno no tiene ni quiere nada de esto en su último año”. “De este modo, lo más probable es que intente lograr un nuevo puente hasta 2015, para que la próxima gestión resuelva los grandes desafíos. Ese puente son los dólares para las reservas. De esto dependerá el nivel de actividad de 2015”, concluyó.