28 Diciembre 2014
En vísperas del año electoral, el Concejo Deliberante de Las Talitas hizo un movimiento político inesperado y, mediante la derogación y sanción de un paquete de ordenanzas, entrecerró la billetera de recursos al intendente Luis Morghenstein (FpV). En particular, la del dinero que llega desde la Nación para obras públicas. Este tipo de trabajos han sido el caballito de batalla en las campañas para los jefes municipales desde 2003.
La decisión del órgano, con cuya mayoría oficialista contaba Morghenstein desde el inicio de su intendencia, puso en alerta al Municipio. En total, la merma en contrataciones directas y mediante cotejo de precios sumará $ 800.000.
“Control de gastos”
La mayoría de los concejales -a excepción de la edil oficialista Juana Lobo-, avaló las medidas. Inclusive, lo hizo también el presidente del cuerpo, Carlos Najar, hermano de la legisladora Adriana Najar y cuñado del intendente.
En primer lugar, el Concejo derogó tres ordenanzas (N° 357/2009, N° 390/ 2010 y N° 432/2012) que disponían montos mínimos para las contrataciones directas y por cotejos de precios para la realización de obras y estudios y para la compra de maquinaria, equipamiento y vehículos. Las normas autorizaban a Morghenstein a celebrar contrataciones por hasta $ 400.000 y por cotejo de hasta $ 750.000.
Luego, mediante otra norma, bajó los topes. En los argumentos, los ediles consignaron que el cambio fue necesario para “controlar efectivamente los gastos” del Ejecutivo y para no “desvirtuar el rol de contralor” del Concejo (los montos superiores a los pautados deberían ser aprobados por el cuerpo). De entrar en vigencia, el intendente sólo podrá hacer contrataciones por hasta $ 50.000 y, mediante comparación de precios, por hasta $ 150.000.
El massista Marcos Kristal se mostró sorprendido por la actitud de sus pares y afirmó que viene denunciando la discrecionalidad de gastos desde el comienzo de la gestión. Su par opositor, Carlos Barros, consignó que si la norma es vetada, insistirán con la iniciativa hasta que quede firme.
“Venimos trabajando y elevamos al Concejo lo que la gente quiere, que son obras públicas. Uno es maduro y la comunidad le pide madurez a los concejales de Las Talitas”, lanzó Morghenstein. Afirmó que no vetaría la iniciativa y, al ser consultado sobre la relación con Najar, afirmó que el desencuentro es “pasajero”.
Advirtió, sin embargo, que hay quienes pretenden “hacer política destruyendo lo que se construyó”. “Si no se aprueba lo que mandamos, no se podrán hacer obras públicas y no se podrán cortar cintas”, concluyó.
Si bien no se oficializó un candidato a intendente por el alperovichismo, tanto Adriana Najar como Carlos Najar tendrían esa aspiración.
La decisión del órgano, con cuya mayoría oficialista contaba Morghenstein desde el inicio de su intendencia, puso en alerta al Municipio. En total, la merma en contrataciones directas y mediante cotejo de precios sumará $ 800.000.
“Control de gastos”
La mayoría de los concejales -a excepción de la edil oficialista Juana Lobo-, avaló las medidas. Inclusive, lo hizo también el presidente del cuerpo, Carlos Najar, hermano de la legisladora Adriana Najar y cuñado del intendente.
En primer lugar, el Concejo derogó tres ordenanzas (N° 357/2009, N° 390/ 2010 y N° 432/2012) que disponían montos mínimos para las contrataciones directas y por cotejos de precios para la realización de obras y estudios y para la compra de maquinaria, equipamiento y vehículos. Las normas autorizaban a Morghenstein a celebrar contrataciones por hasta $ 400.000 y por cotejo de hasta $ 750.000.
Luego, mediante otra norma, bajó los topes. En los argumentos, los ediles consignaron que el cambio fue necesario para “controlar efectivamente los gastos” del Ejecutivo y para no “desvirtuar el rol de contralor” del Concejo (los montos superiores a los pautados deberían ser aprobados por el cuerpo). De entrar en vigencia, el intendente sólo podrá hacer contrataciones por hasta $ 50.000 y, mediante comparación de precios, por hasta $ 150.000.
El massista Marcos Kristal se mostró sorprendido por la actitud de sus pares y afirmó que viene denunciando la discrecionalidad de gastos desde el comienzo de la gestión. Su par opositor, Carlos Barros, consignó que si la norma es vetada, insistirán con la iniciativa hasta que quede firme.
“Venimos trabajando y elevamos al Concejo lo que la gente quiere, que son obras públicas. Uno es maduro y la comunidad le pide madurez a los concejales de Las Talitas”, lanzó Morghenstein. Afirmó que no vetaría la iniciativa y, al ser consultado sobre la relación con Najar, afirmó que el desencuentro es “pasajero”.
Advirtió, sin embargo, que hay quienes pretenden “hacer política destruyendo lo que se construyó”. “Si no se aprueba lo que mandamos, no se podrán hacer obras públicas y no se podrán cortar cintas”, concluyó.
Si bien no se oficializó un candidato a intendente por el alperovichismo, tanto Adriana Najar como Carlos Najar tendrían esa aspiración.
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