06 Enero 2015
Cuánto cuesta comer y tomar algo en la playa
Tucumanos que están descansando en la costa argentina detallaron los precios promedio de los típicos productos que se ingieren durante las vacaciones. Los valores varían de acuerdo al lugar de veraneo. En Mar del Plata, en promedio, una familia tipo necesita $ 300 para comer en el parador de un balneario. Viandas y conservadoras llenas para ahorrar.
CLÁSICOS. Los paradores ofrecen la posibilidad de comer sin alejarse del mar, aunque no suelen ser baratos.
Las vacaciones en la playa se hicieron para descansar y relajarse. Y también para comer y olvidarse de las calorías. Los que quieren aprovechar todo el día del mar, en general, no tienen más opción que picar algo bajo la sombrilla o ir almorzar en un parador. Si no llevan una conservadora con provisiones, pueden llegar a gastar unos $ 300 en promedio en una comida para toda la familia, de acuerdo a los datos que nos aportaron tucumanos que ya están veraneando en la costa argentina.
En un parador playero de Mar del Plata el almuerzo para una familia suma estos precios: las hamburguesas cuestan $ 50 cada una, las empanadas $ 12, los lomitos $ 70, las ensaladas $ 50 y las gaseosas unos $ 20.
Si la idea es comer sobre las esterillas es más barato. Un superpancho en “La Feliz” sale $ 20, el choclo $ 20, la docena de churros $ 50 y un cono con rabas $ 45, según detalla María Inés Borquez, que está en Mar del Plata junto a su esposo, Daniel, y dos hijos menores.
“Hay que reconocer que en vacaciones se come mucho y feo”, dice entre risas la docente de escuela primaria. “En la costa atlántica, la relación precio calidad es de lo peor. La comida tiene tiene mucha grasa. Los licuados, por ejemplo, están llenos de agua y cuestan $ 40 0 $ 45”, añade. María Inés veranea siempre en Mar del Plata y reconoce que este año las cosas están “carísimas”. “Noté que todo aumentó un montón”, dice.
“Comer cerca de los balnearios es muy caro”, dice la educadora. A 10 cuadras de la playa, un sándwich de milanesa se consigue por $ 35 y la hamburguesa por $ 30. Una pizza grande sale $ 42 y las empanadas $ 10 cada una. “Mucha gente compra en estos lugares y los lleva a la playa”, detalla.
Santa Teresita
Más arriba en el mapa, en Santa Teresita, está disfrutando de sus vacaciones Erika Bulacio, junto a su familia y a sus amigos. Son ocho en total. En promedio, cada comida les cuesta unos $ 500. Incluye pizza, hamburguesas y papas.
Los panchos en esta playa se consiguen por $ 20, los sándwichs por $ 40, la porción de papas fritas por $ 35 y el agua para el termo se cobra $ 20 en los paradores, especifica Erica.
En vacaciones, comer afuera es muy frecuente. Esto forma parte del descanso. “Sin embargo, si no te medís se te desploma todo el presupuesto”, resalta Isolina Sánchez, que está veraneando en Valeria del Mar junto a su esposo y a sus tres hijos. “Compramos en el supermercado y llevamos la vianda a la playa. Otra cosa que hacemos algunas veces es volvernos al mediodía a comer a casa”, comenta.
Playas más caras
En Pinamar, Cariló y Mar de las Pampas es más difícil cuidar el bolsillo, según lo que cuenta Mariano Virgilio. En las salidas a comer con su pareja gastó en promedio $ 500. Claro que por ese precio degustó plato elaborados, como pechugas rellenas o pescado, y tomó vino. “Tenés muchas opciones. También podés comer una pizza con gaseosa y gastar $ 300 entre los dos”, precisa. En los paradores una hamburguesa completa cuesta $ 90 y una botella de cerveza, $ 45 o $ 50.
En la mayoría de las playas argentinas, bajo las sombrillas, mandan las heladeritas con frutas, pan y fiambres. A la hora de comprar, los preferidos son los panchos ($ 25), los choclos ($ 20), los licuados ($ 50) y las ensaladas de fruta ($ 40). Todo vale para engañar al estómago y gastar menos, especialmente para los jóvenes que veranean entre amigos y tienen que ser súper gasoleros. A ellos les gusta guardar plata para las salidas nocturnas que cuestan desde $ 100 por persona (en San Bernardo) e incluyen una entrada al boliche y un trago.
UN POCO DE TODO
- Un tostado de jamón y queso cuesta $ 25 en Mar del Plata y $ 30 en Pinamar.
- El jugo exprimido de naranja se consigue por $ 22 en casi todas las playas argentinas.
- El cono de papas fritas sale entre $ 18 y $ 20.
- Un café chico cuesta $ 12 en Mar del Plata y $ 13 o $ 14 en Pinamar.
- Una porción de rabas cuesta desde $ 45 en “La Feliz” y desde $ 65 en Pinamar.
- Tomar la merienda con una porción de torta sale entre $ 60 y $ 80.
- Los juegos para chicos están carísimos, según los veraneantes. En Valeria del Mar, cobran $50 por saltar agarrado de un arnés durante 5 minutos. Otros $ 50 por dar 12 vueltas en un cuatriciclo.
- En los videojuegos de Pinamar la ficha cuesta $ 5, pero para activar un juego para un chico se necesitan 3 fichas. En Mar del Plata, la ficha sale desde $ 3.
- Salir de paseo: un taxi ida y vuelta desde Pinamar hasta Cariló no baja de los $ 150.
- Una familia de cuatro personas que quiere ir al cine a ver una película 3D debe calcular $ 240 en Mar del Plata y $ 280 en Pinamar.
- Ir al teatro en Mar del Plata cuesta en promedio desde $ 250. Hay opciones que van desde $ 90 hasta $ 350.
En un parador playero de Mar del Plata el almuerzo para una familia suma estos precios: las hamburguesas cuestan $ 50 cada una, las empanadas $ 12, los lomitos $ 70, las ensaladas $ 50 y las gaseosas unos $ 20.
Si la idea es comer sobre las esterillas es más barato. Un superpancho en “La Feliz” sale $ 20, el choclo $ 20, la docena de churros $ 50 y un cono con rabas $ 45, según detalla María Inés Borquez, que está en Mar del Plata junto a su esposo, Daniel, y dos hijos menores.
“Hay que reconocer que en vacaciones se come mucho y feo”, dice entre risas la docente de escuela primaria. “En la costa atlántica, la relación precio calidad es de lo peor. La comida tiene tiene mucha grasa. Los licuados, por ejemplo, están llenos de agua y cuestan $ 40 0 $ 45”, añade. María Inés veranea siempre en Mar del Plata y reconoce que este año las cosas están “carísimas”. “Noté que todo aumentó un montón”, dice.
“Comer cerca de los balnearios es muy caro”, dice la educadora. A 10 cuadras de la playa, un sándwich de milanesa se consigue por $ 35 y la hamburguesa por $ 30. Una pizza grande sale $ 42 y las empanadas $ 10 cada una. “Mucha gente compra en estos lugares y los lleva a la playa”, detalla.
Santa Teresita
Más arriba en el mapa, en Santa Teresita, está disfrutando de sus vacaciones Erika Bulacio, junto a su familia y a sus amigos. Son ocho en total. En promedio, cada comida les cuesta unos $ 500. Incluye pizza, hamburguesas y papas.
Los panchos en esta playa se consiguen por $ 20, los sándwichs por $ 40, la porción de papas fritas por $ 35 y el agua para el termo se cobra $ 20 en los paradores, especifica Erica.
En vacaciones, comer afuera es muy frecuente. Esto forma parte del descanso. “Sin embargo, si no te medís se te desploma todo el presupuesto”, resalta Isolina Sánchez, que está veraneando en Valeria del Mar junto a su esposo y a sus tres hijos. “Compramos en el supermercado y llevamos la vianda a la playa. Otra cosa que hacemos algunas veces es volvernos al mediodía a comer a casa”, comenta.
Playas más caras
En Pinamar, Cariló y Mar de las Pampas es más difícil cuidar el bolsillo, según lo que cuenta Mariano Virgilio. En las salidas a comer con su pareja gastó en promedio $ 500. Claro que por ese precio degustó plato elaborados, como pechugas rellenas o pescado, y tomó vino. “Tenés muchas opciones. También podés comer una pizza con gaseosa y gastar $ 300 entre los dos”, precisa. En los paradores una hamburguesa completa cuesta $ 90 y una botella de cerveza, $ 45 o $ 50.
En la mayoría de las playas argentinas, bajo las sombrillas, mandan las heladeritas con frutas, pan y fiambres. A la hora de comprar, los preferidos son los panchos ($ 25), los choclos ($ 20), los licuados ($ 50) y las ensaladas de fruta ($ 40). Todo vale para engañar al estómago y gastar menos, especialmente para los jóvenes que veranean entre amigos y tienen que ser súper gasoleros. A ellos les gusta guardar plata para las salidas nocturnas que cuestan desde $ 100 por persona (en San Bernardo) e incluyen una entrada al boliche y un trago.
UN POCO DE TODO
- Un tostado de jamón y queso cuesta $ 25 en Mar del Plata y $ 30 en Pinamar.
- El jugo exprimido de naranja se consigue por $ 22 en casi todas las playas argentinas.
- El cono de papas fritas sale entre $ 18 y $ 20.
- Un café chico cuesta $ 12 en Mar del Plata y $ 13 o $ 14 en Pinamar.
- Una porción de rabas cuesta desde $ 45 en “La Feliz” y desde $ 65 en Pinamar.
- Tomar la merienda con una porción de torta sale entre $ 60 y $ 80.
- Los juegos para chicos están carísimos, según los veraneantes. En Valeria del Mar, cobran $50 por saltar agarrado de un arnés durante 5 minutos. Otros $ 50 por dar 12 vueltas en un cuatriciclo.
- En los videojuegos de Pinamar la ficha cuesta $ 5, pero para activar un juego para un chico se necesitan 3 fichas. En Mar del Plata, la ficha sale desde $ 3.
- Salir de paseo: un taxi ida y vuelta desde Pinamar hasta Cariló no baja de los $ 150.
- Una familia de cuatro personas que quiere ir al cine a ver una película 3D debe calcular $ 240 en Mar del Plata y $ 280 en Pinamar.
- Ir al teatro en Mar del Plata cuesta en promedio desde $ 250. Hay opciones que van desde $ 90 hasta $ 350.