El 10 del momento

Vueltas de la vida, vueltas del fútbol... El dueño de la 10 en San Martín ya no se llama Albano Becica y tan repentina como su salida (y casi asegurada partida a Atlético) es la aparición de Jesús Soraire, el enganche ex San Jorge que antes de firmar con Unión Aconquija de Catamarca tras su paso por Chaco For Ever probó suerte en La Ciudadela.

“Fue a Alberto Marti (viejo conocido suyo en Almirante Brown) a quien le pregunté qué chances tenía de jugar acá y que del DT me viera. Él habló con Claudio De Camilo cuando el futuro de Becica aún era incierto, entonces me hizo entrenar para que Darío Tempesta me viera, y sino le gustaba ya tenía todo acordado con los de Catamarca”, contó Jesús, que en las últimas horas logró convencer al DT y llegar a un rápido acuerdo económico con la dirigencia que también dio el visto bueno para que se quedara.

La sorpresa mayor para el conductor se dio ayer, cuando el mismo Tempesta le confirmó que hoy ante Atlético jugaría de entrada, reemplazando a Albano. Una locura, porque nadie lo tenía en los planes. “La verdad que siempre es lindo que te toquen estas cosas”, suelta feliz por la noticia. Y pensar que por ser de Lules tuvo que hacer todas sus inferiores en el “Decano”; claro el Complejo Mirkin del “Santo” le quedaba muy lejos y no tenía cómo llegar. Ahora es uno más y su familia, toda sanmartiniana, lo agradece.

“Es un momento hermoso para compartir porque el deseo de todo tucumano es jugar en un grande como San Martín o Atlético. Pero era San Martín lo que más esperaba y por eso lo de las inferiores allá es lo que se me pasa por la cabeza hoy. Si mi abuelo viviera estaría muy orgulloso de saber que hoy me toca vestir estos colores y jugar un clásico”, confesó el hombre de 26 junto a su nena, otra “Santita” de la casa y con la que disfruta ser el 10 del momento en La Ciudadela que además cosechó importantes pasos por UTA, Deportivo Aguilares y Villa Cubas de Catamarca.

Jesús estuvo en el momento justo y en el lugar indicado para hacer su estreno esta tarde, un estreno que a otros les cuesta horrores y tiempo conseguir. “La verdad que sí, por algo decidí preguntar y quedarme. Es un sueño que se va a dar mucho más sabiendo la cantidad de jugadores que pudieron estar hoy acá. Me siento un privilegiado de que en tan poco tiempo se me de. Mi nena cumplió un año en enero, se ve que llegó cargada de buenos momentos, ja. Fue mi bendición y la quiero aprovechar”, cuenta y cuenta Soraire.

Para hoy, el 10 en su discurso pide humildad y trabajo (de paso jugará a la par de Lucas Bossio, su viejo compañero en el “Expreso”): “No somos un grupo de mucho nombre pero sí de mucho sacrificio y con una idea. Siempre digo que solo hubo uno que ganaba los partidos solo, y ese ya no juega más: es Maradona. Todos los demás somos obreritos que necesitamos de todos para poder lograr los objetivos. Y a eso apuntamos hoy y siempre”.