San Martín: el "Chacho" Ponce redobla sus esfuerzos para ser titular

Le pasó a Nicolás Colazo en Boca. Rodolfo Arruabarrena mandó al buen volante por izquierda a hacer las veces de lateral por la misma banda y dentro del equipo siguió rindiendo. El ejemplo “xeneize” sirve para ejemplificar mil casos en el fútbol y uno de ellos es el de Carlos Ponce en San Martín.

El catamarqueño arrancó el torneo con la 8 en la espalda, pero desde la victoria sobre Gimnasia y Tiro en Salta carga la 4, bajando de lateral como Colazo, con la diferencia de que su carril predilecto es el derecho. Mañana volverá a ocuparlo cuando el “santo” reciba a Unión Aconquija de Las Estancias. “La realidad es que la posición es así. Es una costumbre y yo muchas veces jugué o de lateral o de volante (hasta de doble cinco). Pero esto de ser lateral/volante es algo que conozco mucho. Además de las dos maneras me siento cómodo”, confesó el hombre surgido en las infantiles de Almagro, con inferiores en la CAI y Racing.

Ponce sabe que sea cual sea el número que cargue en su espalda cada domingo, la misión siempre será redoblar esfuerzos por su ruta. Por eso antes que elegir una tarea favorita prefiere ver el lado bueno de cada una. “Las dos posiciones tienen su atractivo. De lateral, por ejemplo, puedo llegar más de sorpresa y más de frente; y de volante tengo más llegada al gol. Eso es lo más lindo de esa posición, pero me gustan las dos”.

Lo que sí puede elegir “El Cata” es un jugador de las mismas características que le sirva como ejemplo. “El ‘Chacho’ Coudet”, asegura. “Me gustaba mucho. Por supuesto que se trata de un groso, otro tipo de futbolista. Pero lo que miraba de él era cómo llegaba al área, cómo manejaba la pelota”, cuenta Ponce del actual DT de Rosario Central.

Su obsesión por el fútbol le hace atender las características de varios otros jugadores en actividad. “En general miro mucho fútbol y entonces trato de sacar lo mejor de las dos posiciones. Cómo pasar mejor a la ataque, cómo cerrar una defensa. Por suerte hay fútbol todos los días, en todos lados, y se puede ver cada vez más. Por eso puedo sacar varios ejemplos de cada uno”, comenta Ponce. Claro, al de Coudet, en su versión de jugador, lo tiene fijo en su cabeza.

-¿Y también serías técnico como él? “¡Ya soy! ja, ja. Ya me recibí. Estudié en Pergamino, en la Asociación de Técnicos del Fútbol Argentino (ATFA). Hice el profesorado de técnico de la AFA y ojalá pueda seguir. Ya tengo algo para cuando en el futuro cuando cuelgue los botines. Pero, es difícil ¿no?, porque hay mucho, mucho técnico. Igual, quién te dice... Ojalá se pueda seguir”, respondió.

Después de un momento de volar mentalmente al tiempo de tener que cambiar los pantalones cortos por el buzo de DT, Ponce (que aún tiene 27 años) insiste en esa costumbre de desdoblarse a largo de toda la banda derecha, la que deberá hacer de su propiedad durante su estadía en La Ciudadela. Incluso, ese mismo confort es el que quiere aprovechar mañana, cuando San Martín vaya en busca del primer triunfo de local en el torneo. Por eso finaliza todas sus declaraciones con un único pedido: “ojalá contra Aconquija tengamos otra vez un gran partido”.