11 Abril 2015
LA FOTO MÁS ESPERADA. Alperovich avaló finalmente a Manzur y Jaldo como postulantes al Ejecutivo.
El calor agobiante, una veintena de candidatos nerviosos, discursos encendidos y bombos que perforaban los tímpanos prepararon el ambiente para el momento más esperado.Esperado desde hace siete meses, sobre todo, por el vicegobernador, Juan Manzur y por el ministro del Interior, Osvaldo Jaldo. Ante la mirada de una multitud de funcionarios y simpatizantes, el gobernador y líder del oficialismo provincial, José Alperovich, se puso de pie; se alisó los pliegues del pantalón y, sonriente, se colocó entre ambos para levantarles las manos, y consagrarlos como candidatos a gobernador y vicegobernador. En ese instante el alperovichismo parió su fórmula para las elecciones del 23 de agosto. Y ahí estaba la foto tan mentada. En el club Deportivo Parroquial de Alderetes quedaron sepultadas las especulaciones sobre la integración del dúo que buscará retener el poder.
No hay 23 sin 9
El acto comenzó pasadas las 20. Los primeros en llegar fueron los postulantes a concejales y Sergio Venegas, el candidato que apoya el intendente Julio Silman para sucederlo. Sobre el escenario, había una mesa con siete sillas y, detrás, una tarima para los aspirantes al Concejo y ediles, legisladores y funcionarios. En los asientos se acomodaron los dos alderetenses; Jaldo; Manzur; la senadora Beatriz Rojkés; Alperovich y el secretario de Obras Públicas de la Nación y ahora ex candidato a gobernador, José López.
En los discursos, los dirigentes dejaron en claro que no habrá 23 de agosto (fecha de los comicios provinciales) sin 9 de agosto (PASO nacionales). Ese día, Alperovich quiere convertirse en el candidato a senador con récord de votos.
El primero al micrófono fue Venegas, que se desgargantó para superar el bullicio de los redoblantes. Prometió a Alperovich que Alderetes “no le fallará” en las urnas. Le siguió Silman. Tras desarmarse en elogios para Bety y entregarle un ramo de flores, invitó a los presentes a dar una “distinción” a Alperovich mediante el voto porque “seguirá siendo el conductor después de 2015”: “el 9 de agosto tenemos la obligación de que sea el más votado para senador”.
López fue invitado a pronunciar unas palabras. De jean y zapatillas, se refirió indirectamente a la resignación de su postulación. “Tucumán necesita que trabajemos juntos”, arengó. Sin mencionar a Jaldo ni a Manzur, llamó a votar al “Frente para la Victoria” en agosto. Sí halagó a los Kirchner y a Alperovich.
Jaldo aseguró a los gritos que Alperovich “pasará a la historia” por las obras que concretó. “El gobernador ha decidido su fórmula. Pero para el gobierno hace falta lealtad en la Legislatura”, expresó al momento de formalizar la candidatura de Silman a la Cámara.
La voz de Manzur apenas se escuchaba. Para romper el hielo, empleó una analogía futbolera: “los tucumanos quédense tranquilos, ¡aquí hay equipo!”. Alperovich, desde la mesa, miraba embelesado al ex ministro de Salud de la Nación. “No le saco el traste a la jeringa ni esquivo el bulto. Acepté este desafío (de ir por la gobernación). No le tengo miedo a nada ni a nadie”, bramó desafiante. Apenas concluyó, la marcha peronista estalló para sellar el instante más esperado.
En septiembre, Manzur y Jaldo comenzaron a recorrer el interior por pedido de Alperovich. Encabezaron actos y avalaron candidatos.
Las versiones dieron cuenta hasta último momento de que Beatriz Rojkés, Domingo Amaya o José López podían entrar en el dúo.
Esta semana Amaya anunció que se lanzará el martes. Por otro lado, López bajó su candidatura a la gobernación.
Anoche, en un acto en Alderetes, Alperovich oficializó que los candidatos a la Casa de Gobierno en agosto serán Manzur y Jaldo.
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