13 Abril 2015
El kirchnerismo festejó la victoria de Urtubey en las PASO de Salta
El gobernador salteño recibió el primer aval de los salteños en su pretensión de seguir gobernando. El 17 de mayo será la general El mandatario provincial ratificó su alineamiento con el Gobierno nacional y agradeció el apoyo de la presidenta, Cristina Fernández
SONRISAS. Un distendido Urtubey aparece rodeado por los gobernadores Urribarri (Entre Ríos) y Scioli (Buenos Aires), y el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. telam
La sonrisa es patrimonio exclusivo del kirchnerismo luego del primer test electoral del año.
Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) para elegir candidatos provinciales en Salta le sirvieron al gobernador Juan Manuel Urtubey para respirar aliviado de cara a las generales del 17 de mayo, en las que buscará su re-reelección, pero también le permitieron al Gobierno nacional renovar el ímpetu político para afrontar un 2015 determinante.
La mirada de todos los candidatos presidenciables se había posado sobre el comportamiento electoral de los salteños desde hacía varias semanas. De hecho, los referentes de cada agrupación recorrieron las calles de “La Linda” en los últimos días, a la expectativa de capitalizar para sí el resultado de los comicios locales.
Sin embargo, las previsiones que expresaban las encuestadores no se cumplieron, y el kirchnerismo celebró un contundente triunfo de la mano de Urtubey. Tanto los sondeos como los trabajos a boca de urna advertían sobre un escenario polarizado, con una leve ventaja para el oficialismo.
Pero tras el escrutinio provisorio el mandatario obtuvo alrededor del 47% en las PASO, frente a un 33% del senador Juan Carlos Romero.
Los 14 puntos porcentuales de ventaja del ‘urtubeycismo’ por sobre el ‘romerismo’ -que denunció un “fraude monumental” generado mediante el voto electrónico- fueron largamente festejados por la Casa Rosada.
La principal muestra es que, después de las 19, comenzaron a llegar a esta provincia los máximos referentes, como Daniel Scioli, Aníbal Fernández y Florencio Randazzo, entre otros. Allí, Urtubey ratificó su encolumnamiento hacia el Gobierno nacional y agradeció a la presidenta, Cristina Fernández.
“En estos días expresamos que nuestra amada Salta estaba más cerca del futuro que del pasado. El pueblo nos empezó a decir que esto recién empieza hoy, que los salteños y argentinos debemos seguir adelante. No queremos volver al pasado, queremos vivir una Salta que busca la integración”, remarcó.
El gobernador, además, destacó que con el resultado de ayer se acabó definitivamente la influencia de su antecesor, el peronista disidente Romero.
El mensaje, según interpretaron los dirigentes, estuvo dirigido hacia el ex gobernador. “Se rompió con las viejas cadenas que no tenían nada que ver con la soberanía popular”, afirmó.
Y, visiblemente emocionado, agregó que “tenemos que trabajar incansablemente hasta el 17 de mayo para que se cristalice que la provincia no vuelve atrás”.
“Este triunfo demuestra que Salta va para adelante”, completó en su breve discurso.
Sin festejos
El éxtasis del oficialismo contrastó con las caras largas y el silencio opositor. Mauricio Macri y Sergio Massa se habían paseado por Salta en los últimos días, confiados en los sondeos que ubicaban a sus referentes locales con buenas perspectivas. El líder del PRO, aunque no apoyó a ningún postulante a la Gobernación, confiaba en vencer en la Capital local de la mano de Guillermo Durand Cornejo. El titular del Frente Renovador, en tanto, apuntaló a Romero explícitamente.
Sin embargo, en el municipio más importante de la provincia se produjo un triple empate técnico, en el que sacó una pequeña luz de ventaja el precandidato de Urtubey, Javier David. Detrás quedaron el massista Gustavo Sáenz y Durand Cornejo. Prueba de la desazón reinante en las filas opositoras fue la cancelación de las visitas previstas con anterioridad por Massa y Macri. Los postulantes presidenciables anti “K” que mejor miden en las encuestas sufrieron la primera derrota electoral del año.
Salta, que en los últimos años se hizo famosa también por el crecimiento político de la izquierda, ratificó ayer al Partido Obrero como depositario del “voto castigo”. La agrupación que lidera en el país Jorge Altamira -aunque no llegó a los dos dígitos de adhesión, como esperaba- mantuvo su fuerte presencia en la Capital, a través de la buena performance legislativa. El radicalismo, en tanto, celebró tímidamente el leve ascenso de Miguel Nanni, quien finalizó cuarto. El diputado provincial había recibido el aval del aspirante presidencial por la UCR, Ernesto Sanz.
Otras votaciones
El calendario electoral continuará el domingo próximo con las PASO en Santa Fe y en Mendoza, y se profundizará el 26 de este mes con las Primarias en la Ciudad de Buenos Aires y con las generales de Neuquén. Serán los nuevos rounds entre el kirchnerismo, el macrismo y el massismo.
Las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) para elegir candidatos provinciales en Salta le sirvieron al gobernador Juan Manuel Urtubey para respirar aliviado de cara a las generales del 17 de mayo, en las que buscará su re-reelección, pero también le permitieron al Gobierno nacional renovar el ímpetu político para afrontar un 2015 determinante.
La mirada de todos los candidatos presidenciables se había posado sobre el comportamiento electoral de los salteños desde hacía varias semanas. De hecho, los referentes de cada agrupación recorrieron las calles de “La Linda” en los últimos días, a la expectativa de capitalizar para sí el resultado de los comicios locales.
Sin embargo, las previsiones que expresaban las encuestadores no se cumplieron, y el kirchnerismo celebró un contundente triunfo de la mano de Urtubey. Tanto los sondeos como los trabajos a boca de urna advertían sobre un escenario polarizado, con una leve ventaja para el oficialismo.
Pero tras el escrutinio provisorio el mandatario obtuvo alrededor del 47% en las PASO, frente a un 33% del senador Juan Carlos Romero.
Los 14 puntos porcentuales de ventaja del ‘urtubeycismo’ por sobre el ‘romerismo’ -que denunció un “fraude monumental” generado mediante el voto electrónico- fueron largamente festejados por la Casa Rosada.
La principal muestra es que, después de las 19, comenzaron a llegar a esta provincia los máximos referentes, como Daniel Scioli, Aníbal Fernández y Florencio Randazzo, entre otros. Allí, Urtubey ratificó su encolumnamiento hacia el Gobierno nacional y agradeció a la presidenta, Cristina Fernández.
“En estos días expresamos que nuestra amada Salta estaba más cerca del futuro que del pasado. El pueblo nos empezó a decir que esto recién empieza hoy, que los salteños y argentinos debemos seguir adelante. No queremos volver al pasado, queremos vivir una Salta que busca la integración”, remarcó.
El gobernador, además, destacó que con el resultado de ayer se acabó definitivamente la influencia de su antecesor, el peronista disidente Romero.
El mensaje, según interpretaron los dirigentes, estuvo dirigido hacia el ex gobernador. “Se rompió con las viejas cadenas que no tenían nada que ver con la soberanía popular”, afirmó.
Y, visiblemente emocionado, agregó que “tenemos que trabajar incansablemente hasta el 17 de mayo para que se cristalice que la provincia no vuelve atrás”.
“Este triunfo demuestra que Salta va para adelante”, completó en su breve discurso.
Sin festejos
El éxtasis del oficialismo contrastó con las caras largas y el silencio opositor. Mauricio Macri y Sergio Massa se habían paseado por Salta en los últimos días, confiados en los sondeos que ubicaban a sus referentes locales con buenas perspectivas. El líder del PRO, aunque no apoyó a ningún postulante a la Gobernación, confiaba en vencer en la Capital local de la mano de Guillermo Durand Cornejo. El titular del Frente Renovador, en tanto, apuntaló a Romero explícitamente.
Sin embargo, en el municipio más importante de la provincia se produjo un triple empate técnico, en el que sacó una pequeña luz de ventaja el precandidato de Urtubey, Javier David. Detrás quedaron el massista Gustavo Sáenz y Durand Cornejo. Prueba de la desazón reinante en las filas opositoras fue la cancelación de las visitas previstas con anterioridad por Massa y Macri. Los postulantes presidenciables anti “K” que mejor miden en las encuestas sufrieron la primera derrota electoral del año.
Salta, que en los últimos años se hizo famosa también por el crecimiento político de la izquierda, ratificó ayer al Partido Obrero como depositario del “voto castigo”. La agrupación que lidera en el país Jorge Altamira -aunque no llegó a los dos dígitos de adhesión, como esperaba- mantuvo su fuerte presencia en la Capital, a través de la buena performance legislativa. El radicalismo, en tanto, celebró tímidamente el leve ascenso de Miguel Nanni, quien finalizó cuarto. El diputado provincial había recibido el aval del aspirante presidencial por la UCR, Ernesto Sanz.
Otras votaciones
El calendario electoral continuará el domingo próximo con las PASO en Santa Fe y en Mendoza, y se profundizará el 26 de este mes con las Primarias en la Ciudad de Buenos Aires y con las generales de Neuquén. Serán los nuevos rounds entre el kirchnerismo, el macrismo y el massismo.
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