La vida de Bergoglio antes de ser Papa se verá en pantalla grande el mes próximo

EL VERDADERO Y EL FICTICIO. El actor Darío Grandinetti junto con el Papa Francisco en la plaza San Pedro.  EL VERDADERO Y EL FICTICIO. El actor Darío Grandinetti junto con el Papa Francisco en la plaza San Pedro.
25 Agosto 2015
“El Padre Jorge”. Así se llama el primer largometraje sobre el Papa Francisco que se estrenará el mes próximo en todas las salas del país. La película, con guión y dirección de Beda Docampo Feijoó, intenta reflejar la vida de Jorge Bergoglio desde su juventud hasta que fue elegido para ocupar el sillón de Pedro. El papel principal está protagonizado por Darío Grandinetti en una coproducción argentino-española de Pampa Film.

Hace escasos días se proyectó un anticipo para la prensa. Los que la vieron afirman que el trabajo cuenta con una muy buena reconstrucción de época, ambientada en el Buenos Aires de los años 50, pero que tiene grandes omisiones, que llaman la atención sobre todo al público argentino que conoce de cerca la historia del personaje. Las grandes lagunas de la película son, por ejemplo, las descalificaciones mediáticas de las que fue objeto Bergoglio cuando era cardenal por parte del matrimonio gobernante de Néstor Kirchner y Cristina Fernández, y los reiterados desaires que le hicieron ambos al no asistir a los Tédem. Otro dato que no figura en la película es la “campaña de desprestigio” que se armó previo al cónclave, en el que resultó elegido papa. Aquellas carpetas con una supuesta historia negra de Bergoglio de la época de la dictadura, que finalmente se desestimaron, no se mencionan en el trabajo fílmico.

Adolescencia y juventud

Un marco muy logrado de paisajes argentinos, giros idiomáticos característicos de Buenos Aires, ubican geográficamente al personaje. En ese clima se narra el despertar de la vocación sacerdotal y la influencia de Rosa, la abuela de Bergoglio en esa decisión. Estos son algunos de los activos de la producción inspirada en el libro de la periodista del diario La Nación Elizabetta Piqué titulado “Francisco, vida y revolución”. La película refleja con bastante fidelidad los momentos ya conocidos de la vida de Bergoglio y los que se fueron revelando por los medios de comunicación, luego de su elección.

Como relatar la historia real se alude a un personaje ficticio, una periodista española, Silvia Abascal.

“La película es correcta, bienintencionada y logra una buena síntesis de la vida del Padre Jorge hasta su llegada a la silla de Pedro”, opina Claudia Peiró en una nota de Infobae.com. “Por momentos, los recursos de guión son algo obvios, haciendo demasiado explícito el afán de incluir todos los elementos de la vida de Bergoglio, hasta su costumbre de tomar colectivo, y los tópicos , ya mundialmente famosos de sus homilías: pecado sí, corrupción no, periferias existenciales, etcétera”, afirma la periodista.

“Hay además cierta simplificación en un relato que no supera lo descriptivo. Las contradicciones que atraviesan una institución como la Iglesia Católica y que llegan a puntos culminantes en los cónclaves están resumidas en una lucha entre conservadores y progresistas, lo que no refleja la complejidad de lo que estaba en juego, tanto en 2005 como en 2013, ni de la propia personalidad de Jorge Bergoglio, difícil de encasillar rápidamente en esa dicotomía”, agrega la misma fuente.

La historia llevada al cine toma los puntos más sobresalientes y en forma detallada de la vida de Bergoglio. Están presentes el trabajo del cardenal en las villas de Buenos Aires, el compromiso con los pobres, la situación que se plantea con los sacerdotes “villeros” amenazados por los narcos, el lavado de pies a los más humildes en las ceremonias presididas por Belgoglio y el diálogo interreligioso con integrantes de distintos credos. En general se alude en forma constante a la humildad, la austeridad, los gestos de Bergoglio. También hay una escena que muestra las gestiones que realiza el cardenal por los jesuitas secuestrados, los amigos a los que ayudó a escapar de la represión.

La interpretación del Bergoglio joven está a cargo de Gabriel Gallicchio. El elenco se completa con destacadas actuaciones de Laura Novoa, Leonor Manso y Jorge Marrale. En síntesis, una realización correcta, sin sorpresas y con el acento puesto en la porteñidad y argentinidad del personaje.

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios