15 Septiembre 2016
Mientras un joven motociclista permanecía en grave estado, su familia intentaba determinar quién lo había chocado para luego huir sin prestarle auxilio. Dos días después del accidente, la Policía consiguió encontrar el vehículo y aprehender al conductor que se había dado a la fuga.
El accidente se produjo el domingo a la mañana sobre la autopista General San Martín, en la localidad de La Reducción. Cuando llegó la Policía, se encontró con Eric Rafael Oleada, de 23 años, que se encontraba tirado al lado de su motocicleta. Estaba gravemente herido y en los alrededores habían quedado esparcidos los vidrios del vehículo que lo había embestido.
Policías de la división Sustracción de Automotores, a cargo de los comisarios Cándido Galván y Gustavo Beltrán, consiguieron divisar que en uno de esos trozos de vidrios estaba impreso el número de identificación vehicular. De esa manera pudieron comprobar que el rodado que había chocado a Oleada era una camioneta doble cabina.
El fiscal de Instrucción de la II° Nominación, Claudio Bonari, ordenó el secuestro del vehículo y la aprehensión de su conductor por el delito de lesiones culposas. Los policías consiguieron dar con él dos días después del accidente. El hombre tiene 41 años y vive en en una localidad cercana a Ranchillos.
En su casa estaba guardada la Amarok y, según relataron fuentes policiales, los daños estaban a la vista: estaban abolladas las puertas del lado del conductor, roto el guardabarros y en el interior del vehículo había restos de vidrios. La camioneta quedó secuestrada en la ex Brigada. En cuanto al motociclista, hasta el cierre de esta edición, continuaba en grave estado.
El accidente se produjo el domingo a la mañana sobre la autopista General San Martín, en la localidad de La Reducción. Cuando llegó la Policía, se encontró con Eric Rafael Oleada, de 23 años, que se encontraba tirado al lado de su motocicleta. Estaba gravemente herido y en los alrededores habían quedado esparcidos los vidrios del vehículo que lo había embestido.
Policías de la división Sustracción de Automotores, a cargo de los comisarios Cándido Galván y Gustavo Beltrán, consiguieron divisar que en uno de esos trozos de vidrios estaba impreso el número de identificación vehicular. De esa manera pudieron comprobar que el rodado que había chocado a Oleada era una camioneta doble cabina.
El fiscal de Instrucción de la II° Nominación, Claudio Bonari, ordenó el secuestro del vehículo y la aprehensión de su conductor por el delito de lesiones culposas. Los policías consiguieron dar con él dos días después del accidente. El hombre tiene 41 años y vive en en una localidad cercana a Ranchillos.
En su casa estaba guardada la Amarok y, según relataron fuentes policiales, los daños estaban a la vista: estaban abolladas las puertas del lado del conductor, roto el guardabarros y en el interior del vehículo había restos de vidrios. La camioneta quedó secuestrada en la ex Brigada. En cuanto al motociclista, hasta el cierre de esta edición, continuaba en grave estado.
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