27 Septiembre 2016
EN TUCUMÁN. Macri y Cano, en la previa de las elecciones de 2015. la gaceta / foto de Diego Aráoz (archivo)
“Es una de las internas del Gobierno más feroces, pero, al mismo tiempo, una de las que con mayor sordina se mantienen ante la opinión pública. Se trata de la disputa que los macristas Rogelio Frigerio y Guillermo Dietrich, ministros del Interior y de Transporte, respectivamente, mantienen con el radical José Cano, titular de la denominada Unidad Plan Belgrano”. Así comienza una información publicada ayer por el diario La Nación, que da cuenta de una feroz compulsa interna entre dos de los ministros más fuertes de Mauricio Macri y el dirigente tucumano.
“Si bien Cano ha demostrado paciencia casi oriental, son varios los correligionarios que vienen ‘calentándole la cabeza’ para que reaccione y haga notar su enojo. ¿La razón? Las evidentes maniobras de Frigerio y Dietrich para arrebatarle cualquier tipo de figuración que pueda tener el radical”, continúa la información periodística del matutino porteño.
“Así, cada vez que el Gobierno tiene que anunciar alguna obra para el norte del país, área que le corresponde al Plan Belgrano, los ministros macristas le ganan de mano y aparecen en las provincias encabezando, junto a los gobernadores locales, los actos de lanzamiento de las obras. Los ejemplos abundan, sobre todo de parte de Dietrich. Primereó a Cano en el anuncio de la reanudación de las obras del Belgrano Cargas, tren troncal para el noroeste argentino (NOA), y hasta en el lanzamiento de un plan de conectividad en Chaco. El radical mantiene silencio, pero cada día son más los que dicen que a Cano lo están dejando de lado para perjudicar a la UCR”, añade el escrito.
La compulsa no es vieja y ya venía mostrándose, de a poco, en distintos actos políticos e informaciones periodísticas. Por ejemplo, no pasó desapercibida la presencia en varios de esos actos en los que no estaba Cano del secretario de Vivienda de la Nación, Domingo Amaya. El ex compañero de fórmula del radical formuló anuncios de complejos habitacionales en distintas provincias del NOA -incluso Tucumán- sin que se viera al lado suyo al titular del Plan Belgrano.
La orden de Macri, al armar su Gabinete para comandar la Casa Rosada, era que todas las obras que tuvieran que ver con el Norte del país se canalicen y se anuncien a través de la estructura de la Unidad Ejecutora del Plan Belgrano. Sin embargo, la interna que mantienen los propios hombres del Presidente entre sí están haciendo mella aquella consigna.
La pelea se inscribe, según los conocedores de los pasillos del poder, en una todavía mayor: la que encabezan el jefe de Gabinete, Marcos Peña, con Frigerio.
En esa compulsa se inscribe a Cano entre los seguidores de Peña y a Amaya entre los fieles de Frigerio. En el medio, en diarios nacionales se habla de una reducción en el presupuesto de la estructura del radical tucumano, algo que fue desmentido por su entorno.
Por lo pronto, los roces internos ya salieron a la luz y habrá que ver si afecta o no la programación del Plan Belgrano, que incluía obras millonarias de infraestructura para la región.
“Si bien Cano ha demostrado paciencia casi oriental, son varios los correligionarios que vienen ‘calentándole la cabeza’ para que reaccione y haga notar su enojo. ¿La razón? Las evidentes maniobras de Frigerio y Dietrich para arrebatarle cualquier tipo de figuración que pueda tener el radical”, continúa la información periodística del matutino porteño.
“Así, cada vez que el Gobierno tiene que anunciar alguna obra para el norte del país, área que le corresponde al Plan Belgrano, los ministros macristas le ganan de mano y aparecen en las provincias encabezando, junto a los gobernadores locales, los actos de lanzamiento de las obras. Los ejemplos abundan, sobre todo de parte de Dietrich. Primereó a Cano en el anuncio de la reanudación de las obras del Belgrano Cargas, tren troncal para el noroeste argentino (NOA), y hasta en el lanzamiento de un plan de conectividad en Chaco. El radical mantiene silencio, pero cada día son más los que dicen que a Cano lo están dejando de lado para perjudicar a la UCR”, añade el escrito.
La compulsa no es vieja y ya venía mostrándose, de a poco, en distintos actos políticos e informaciones periodísticas. Por ejemplo, no pasó desapercibida la presencia en varios de esos actos en los que no estaba Cano del secretario de Vivienda de la Nación, Domingo Amaya. El ex compañero de fórmula del radical formuló anuncios de complejos habitacionales en distintas provincias del NOA -incluso Tucumán- sin que se viera al lado suyo al titular del Plan Belgrano.
La orden de Macri, al armar su Gabinete para comandar la Casa Rosada, era que todas las obras que tuvieran que ver con el Norte del país se canalicen y se anuncien a través de la estructura de la Unidad Ejecutora del Plan Belgrano. Sin embargo, la interna que mantienen los propios hombres del Presidente entre sí están haciendo mella aquella consigna.
La pelea se inscribe, según los conocedores de los pasillos del poder, en una todavía mayor: la que encabezan el jefe de Gabinete, Marcos Peña, con Frigerio.
En esa compulsa se inscribe a Cano entre los seguidores de Peña y a Amaya entre los fieles de Frigerio. En el medio, en diarios nacionales se habla de una reducción en el presupuesto de la estructura del radical tucumano, algo que fue desmentido por su entorno.
Por lo pronto, los roces internos ya salieron a la luz y habrá que ver si afecta o no la programación del Plan Belgrano, que incluía obras millonarias de infraestructura para la región.
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