Comienza el reajuste de las facturas de electricidad

Con la publicación del nuevo cuadro tarifario, la Empresa de Distribución Eléctrica de Tucumán (EDET) ya puede aplicar la primera suba, del 15%, en la tarifa del servicio. Sin embargo, la boleta que llegue este mes a los domicilios de los usuarios tendrá un impacto acotado, ya que se cobraría sólo la mitad del servicio brindado. Voceros de la compañía indicaron ayer a LA GACETA que el aumento pleno se dará en marzo, cuando también está previsto que suba otro 20% la factura de la luz.

Estos dos reajustes corresponden a un aumento de precio estacional, mientras que en abril la electricidad subirá otro 25%, que representa el nuevo Valor Agregado de Distribución (VAD), que tendrá vigencia hasta 2020, aunque con reajustes semestrales por la inflación.

Según EDET, los tres reajustes no se aplicarán de manera integral, ya que una amplia franja de usuarios residenciales pagará un reajuste menor o, directamente, no será alcanzado por el sinceramiento de tarifas. La distribuidora indicó que se trata de los 165.000 clientes que pagan la tarifa social, sobre un total de 450.000 usuarios residenciales de toda la provincia.

El primer aumento tendrá un impacto de entre $ 40 y $ 60 mensuales al importe que venía llegando en la factura del servicio de luz. Para el caso de la tarifa social, el reajuste “será mínimo” o cero.

Según datos del Ministerio de Energía de la Nación, que conduce Juan José Aranguren, con los reajustes que se aplicarán, Tucumán quedaría entre los cinco de los 24 distritos del país con menor impacto de la reducción de subsidios en las facturas que reciben los usuarios. En octubre pasado, luego de un período de audiencias públicas ordenado por la Corte Suprema de Justicia, el Ministerio de Energía había aumentado también las tarifas de gas entre 300% y 500% para usuarios residenciales, comercios e industrias. Durante 2016, el Gobierno nacional había dispuesto incrementos en la luz y en el gas superiores al 700%, pero diferentes recursos legales presentados por usuarios, y aceptados por la Justicia, derivaron en una disminución de los aumentos, que fueron aplicados en cuotas para que no generen un fuerte impacto en los bolsillos de los usuarios. El argumento oficial, para defender los reajustes tarifarios, fue que cuando asumió en diciembre de 2015 detectó en el país una “emergencia eléctrica”.

El jefe de Gabinete, Marcos Peña, defendió las alzas tarifarias al asegurar que son “para promover una mayor inversión”, consignó la agencia DyN. Confió en que a pesar del impacto que tienen esas subas, el Gobierno podrá cumplir con la meta de inflación planteada por el Banco Central, en torno del 17% para este año. “Hoy la inflación está en el séptimo mes en torno del 1,5% y aspiramos a cumplir la meta del Banco Central, de entre el 15 y 17%. Y creemos que los reajustes tarifarios son para promover justamente una mayor inversión”, expresó el funcionario durante una conferencia de prensa en Casa de Gobierno.