19 Abril 2017
DEFENSA. La seguridad del Parlamento dispersó a los agresores con gases. télam
BRASILIA.- Sindicatos que agrupan a varios cuerpos de policía de Brasil protestaron ayer contra la propuesta gubernamental de reformas al régimen de jubilaciones y causaron serios incidentes que fueron reprimidos por la guardia del Congreso. La protesta fue convocada contra una de las principales reformas del Gobierno, que apunta a aumentar la edad mínima para la jubilación, y era pacífica hasta que un grupo de manifestantes intentó ingresar por la fuerza a la sede del Parlamento.
Los miembros de la Policía Legislativa intentaron impedirlo y se generaron incidentes en los que se rompieron algunas puertas de cristal y los manifestantes fueron reprimidos con gas lacrimógeno y gas pimienta en pleno salón de entrada al Congreso. Los sindicatos que promovieron la protesta calcularon en unos 3.000 el número de manifestantes, pero sólo unos pequeños grupos intentaron entrar por la fuerza al palacio legislativo.
El canal Globo News mostró imágenes de manifestantes que habían llegado hasta las escaleras internas de la Cámara, y cristales rotos en varias instalaciones.
Según las normas actuales, en Brasil las mujeres pueden jubilarse con 30 años de aportes y los hombres con 35; y no existe para ello un límite de edad, con lo que hay quienes se acogen al sistema de protección social con apenas 50 años de edad.
La propuesta inicial del Gobierno planteó una edad mínima de 65 años, tanto para hombres como para mujeres, con por lo menos 25 años de aportes.
Sin embargo, frente a la resistencia de algunos sectores del Congreso, el Gobierno aceptó alterar el proyecto, que ahora propone una edad mínima de 62 años para las mujeres y mantiene los 65 para los hombres.
Según el Gobierno, esa reforma es clave para salvar al régimen de jubilaciones de la quiebra a la que pueden llevar su abultado déficit; y también permitirá apalancar la recuperación de la economía nacional, que lleva dos años en una profunda recesión.
Temer no renuncia
El presidente de Brasil, Michel Temer, convocó a los legisladores que lo respaldan en el Congreso a “resistir” la ola de denuncias que involucra a la clase política en la llamada operación “Lava Jato” (investiga un gigantesco escándalo de corrupción). Les pidió aprobar los mayores proyectos de su gobierno, la Reforma Jubilatoria y la flexibilización de la Ley Laboral.
“Muchas veces se busca desprestigiar a la clase política y frente a esto necesitamos resistir; yo resisto siempre que puedo”, remarcó Temer durante un discurso ante los diputados de la coalición oficialista.
Temer, el lunes a la noche, en declaraciones al canal Rede TV, descartó su renuncia al cargo pese al escándalo generado por los casos de corrupción de la empresa Odebrecht, que lo involucraron directamente junto con ocho ministros de su gabinete. (Télam)
Los miembros de la Policía Legislativa intentaron impedirlo y se generaron incidentes en los que se rompieron algunas puertas de cristal y los manifestantes fueron reprimidos con gas lacrimógeno y gas pimienta en pleno salón de entrada al Congreso. Los sindicatos que promovieron la protesta calcularon en unos 3.000 el número de manifestantes, pero sólo unos pequeños grupos intentaron entrar por la fuerza al palacio legislativo.
El canal Globo News mostró imágenes de manifestantes que habían llegado hasta las escaleras internas de la Cámara, y cristales rotos en varias instalaciones.
Según las normas actuales, en Brasil las mujeres pueden jubilarse con 30 años de aportes y los hombres con 35; y no existe para ello un límite de edad, con lo que hay quienes se acogen al sistema de protección social con apenas 50 años de edad.
La propuesta inicial del Gobierno planteó una edad mínima de 65 años, tanto para hombres como para mujeres, con por lo menos 25 años de aportes.
Sin embargo, frente a la resistencia de algunos sectores del Congreso, el Gobierno aceptó alterar el proyecto, que ahora propone una edad mínima de 62 años para las mujeres y mantiene los 65 para los hombres.
Según el Gobierno, esa reforma es clave para salvar al régimen de jubilaciones de la quiebra a la que pueden llevar su abultado déficit; y también permitirá apalancar la recuperación de la economía nacional, que lleva dos años en una profunda recesión.
Temer no renuncia
El presidente de Brasil, Michel Temer, convocó a los legisladores que lo respaldan en el Congreso a “resistir” la ola de denuncias que involucra a la clase política en la llamada operación “Lava Jato” (investiga un gigantesco escándalo de corrupción). Les pidió aprobar los mayores proyectos de su gobierno, la Reforma Jubilatoria y la flexibilización de la Ley Laboral.
“Muchas veces se busca desprestigiar a la clase política y frente a esto necesitamos resistir; yo resisto siempre que puedo”, remarcó Temer durante un discurso ante los diputados de la coalición oficialista.
Temer, el lunes a la noche, en declaraciones al canal Rede TV, descartó su renuncia al cargo pese al escándalo generado por los casos de corrupción de la empresa Odebrecht, que lo involucraron directamente junto con ocho ministros de su gabinete. (Télam)
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