La oferta de inmuebles en la Argentina no alcanza para abastecer la creciente demanda de crédito hipotecario. Así, miles de préstamos ya preadjudicados en los bancos oficiales y privados tienen dificultades para encontrar una vivienda que calce con el dinero disponible, según afirmaron fuentes del sector inmobiliario.
“Hace 15 años que no se construyen viviendas para tomadores de crédito hipotecario. El mercado se volcó al comprador con perfil inversor y no se construyó para el usuario final. Eso pasó en todo el país. Es muy complicado ubicar oferta nueva con características para este tomador de crédito”, explicó el analista del mercado inmobiliario, Germán Gómez Picasso.
“Por eso los créditos para los desarrolladores inmobiliarios, como el que ofrece el Banco Nación, a una tasa del 17%, son ideales para cerrar el círculo virtuoso que permite que los constructores puedan financiar y construir viviendas para ese sector no abastecido”, sugirió el experto.
La semana pasada el titular del Banco Nación, Javier González Fraga, comentó, en un encuentro con corredores de la Cámara Inmobiliaria Argentina (CÍA), que la entidad a su cargo tiene asignados 9.000 créditos hipotecarios que no encuentran una unidad acorde con el dinero disponible. “Realmente falta la oferta inmobiliaria. Habrá mucha demanda pero la oferta es poca. Se ha construido para familias con más dinero”, observó Mario Gómez, miembro del Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Capital Federal (Cucicba).
El directivo ejemplificó que el Banco Santander Río tiene pre-aprobados 15.000 créditos hipotecarios y que 3.000 de ellos corresponden a inmuebles tasados en todo el país, lo cual quiere decir que se trata de familias que ya encontraron su propiedad. Por esto se desembolsaron 1.000 créditos. “Sólo 3.000 dijeron que encontraron el inmueble que buscaban; el resto no pudo”, sostuvo Gómez. “Si una familia busca un inmueble de tres o de cuatro ambientes, las unidades que encuentran exceden el valor de lo ahorrado y de lo que pueden conseguir por el crédito”, añadió, según consignó la agencia de noticias Télam.
Respecto de los 9.000 créditos pre-adjudicados por el Banco Nación, Gómez consideró que la entidad dispone de $ 67.000 millones para otorgar y afirmó que no hay oferta suficiente.” Por eso se está estructurando un crédito para comprar en preventa. Hay que implementar las hipotecas en pozo. Para eso tiene que amoldarse la operatoria mediante una reglamentación del Banco Central o por ley del Congreso”, insistió.
Una ola de inversiones
Los efectos del blanqueo de capitales son esperados con ansias por los empresarios y por los desarrolladores inmobiliarios. ”Aún no se volcó al sector inmobiliario. Las personas que ingresaron al blanqueo en diciembre del año pasado podría disponer del dinero a partir de junio próximo”, estimó el titular de Cucicba, Héctor D’ Odorico, en referencia a que el dinero debía ser inmovilizado por seis meses.
Sobre la posibilidad de que se generalice la construcción industrializada, D’Odorico consideró que, de concretarse, le daría un impulso a la demanda. “Las familias podrían tener en menos tiempo viviendas más accesibles”, agregó.
Por su parte, Gómez consideró que la construcción industrializada acorta los tiempos de obra. “Se pueden hacer en forma prefabricada algunos procesos. En Europa hay muchas viviendas industrializadas de gran calidad. En la Argentina, se suele vincular con viviendas de mala calidad. Del lado de la demanda hay una resistencia a este tipo de construcción que no utiliza el ladrillo tradicional”, analizó el empresario.
En tanto, Gómez Picasso, manifestó que en la Argentina hay un atrasados en sistemas constructivos. “Hay nuevas forma de construir a partir de nuevas tecnologías”, sostuvo, y aseguró que la construcción industrializada mejora mucho los tiempos de ejecución y los costos.
“El país está en un punto de inflexión, ya que constructores y desarrolladores tendrán que generar productos para usuarios distintos. No están acostumbrados a manejarse con ese público. Saben hacerlo con el público inversor. Ahora se abre un negocio muy grande con el comprador de vivienda para uso propio”, finalizó Gómez Picasso.