Impulsan el ingreso de automóviles eléctricos: mirá los autos que se vienen y cuanto cuesta la carga

Los fabricantes aseguran que los autos eléctricos contaminan un 50% menos que los vehículos de motor a combustión. Este tipo de autos se han convertido en un elemento clave de la transición energética. Aunque la industria tarda un poco en instalarse, los vehículos eléctricos llegaron para quedarse. La escasez de infraestructura de carga es, por ahora, un obstáculo.

EN CASA. Buscar un enchufe en el garage para cargar el motor del auto parece una cuestión lejana, pero no falta mucho para empezar a practicarlo. renault.es EN CASA. Buscar un enchufe en el garage para cargar el motor del auto parece una cuestión lejana, pero no falta mucho para empezar a practicarlo. renault.es
25 Febrero 2018

Hace 50 años, cuando salió al mercado el primer auto a inyección electrónica, parecía más un lujo de excéntricos que una tecnología para ahorrar combustible, lo cual implicaba una doble ganancia: para el bolsillo y para el medio ambiente. Aún así, con todos los beneficios indiscutibles, la inyección tardó más de tres décadas en reemplazar por completo a los -en comparación- poco eficientes carburadores.

Del mismo modo, al cambio de paradigma que implica el automóvil eléctrico, también le está llevando tiempo despegar. Y parece que la tarea es todavía más difícil: elevados costos al momento de comprar, menor autonomía y potencia, una red insuficiente de estaciones de carga son los principales escollos a sortear para que sea una tecnología adoptable.

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Aun así, algunos gobiernos están presionando para reemplazar el tradicional motor de combustión interna por vehículos eléctricos más limpios. Gran Bretaña y Francia, por ejemplo, ya decidieron que para 2040 serán ilegales los autos 100% nafteros o diesel. Y se espera que recién para 2050 el precio de un eléctrico se equipare a uno de combustión: hasta el momento, el más “asequible” es el Bolt EV de General Motors, que en Estados Unidos, con un generoso subsidio estatal, se vende a U$S 30.000... unos $ 600.000 argentinos por un auto que en su equivalente en motor tradicional no costaría más de la mitad de ese precio.

Precisamente el Bolt EV será uno de los primeros en llegar a la Argentina. General Motors anunció la semana pasada que planea su desembarco para el año que viene en nuestro país, en lo que podría ser el inicio de una nueva era en el transporte urbano. La multinacional se envalentonó con la disposición del Gobierno argentino, que el año pasado bajó a 0% los impuestos a la importación de vehículos impulsados por energías alternativas.

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La comercialización

Antes de eso, muy pronto en realidad, Renault lanzará en Argentina el Kangoo ZE 33, un utilitario que podría convertirse en el primer vehículo eléctrico 100% en comercializarse en el país. Recordemos que desde 2009 se vende el Toyota Prius, pero es un híbrido de doble motor eléctrico y a combustión (ver “Tipos...). Además, están en lista de espera aunque sin fechas precisas el BAIC EX260, el Ford Mondeo Híbrido, el VW Golf GTE y el Nissan Leaf.

Pero antes de pensar en los modelos, sus respectivos precios y cualidades, habrá que analizar la infraestructura de carga en el país. Una autonomía de 300 kilómetros como promete el Bolt EV sería óptima para uso en ciudad, pero no así para hacer un viaje de Tucumán a Córdoba, por ejemplo. La carga normal de estos vehículos (en la casa) insume unas seis horas y las estaciones de servicio de carga rápida, alrededor de una hora. Por lo pronto, los montos de ahorro en combustible entre un sistema y otro, son por demás alentadores: un eléctrico puede llegar a consumir hasta 10 veces menos dinero que un naftero.

LOS AUTOS QUE SE VIENEN AL PAÍS

- Renault Kangoo ZE 33.

Es la versión 100% del clásico furgón de Renault. Cuenta con una autonomía de 300 km, que se logran con una carga total de la batería durante seis horas en un tomacorriente hogareño. Se comenzaría a vender en el país el mes que viene, a un precio estimado de $600.000.

- BAIC EX 260.

Si se cumplen los planes de la fabricante china BAIC, su modelo BAIC EX 260 comenzaría a venderse en julio de este año en el país. Es un SUV 100% eléctrico, con una autonomía de 250 kilómetros. Su velocidad máxima: 125 km/h. Su precio estimado: U$S 40.400.

- Chevrolet Bolt-EV.

Se comenzaría a vender este año en Argentina, según anunció hace un par de semanas General Motors. El Bolt-EV es considerado el vehículo 100% eléctrico con mayor autonomía y el más asequible: recorre 383 kilómetros con una carga de batería. En Estados Unidos tiene un costo de U$S 39.000, menos una subvención estatal directa de U$S 9.000.

- Ford Mondeo Híbrido.

Combina un motor a combustión de 2.0 cc con uno eléctrico que se recarga con el primero. El resultado es una autonomía de más de 1.000 km con un consumo combinado de entre 3,9 y 4,2 litros de nafta cada 100 km. En Europa el precio promedia los 30.000 euros, unos $ 734.000.

- VW Golf GTE.

Volkswagen confirmó que venderá desde mitad de este año su modelo híbrido enchufable en Argentina. El Golf GTE combina un motor eléctrico con uno 1.4 TSI naftero, capaces de otorgar en conjunto hasta 204 CV. Con una carga completa permite transitar 50 km únicamente con el motor eléctrico.

¿CUÁNTO CUESTA LA CARGA?

El año pasado YPF anunció que equiparía 220 estaciones de servicio en toda Argentina con cargadores rápidos para autos eléctricos. El proceso, aunque muy de a poco, ya comenzó. Sin embargo, es probable que primero lleguen los autos a que las estaciones de servicio, por lo cual quienes quieran o puedan acceder a los vehículos eléctricos, lo deban cargar en sus casas.

¿Pero, cuánto costaría, en la factura de la luz, cargar el auto? Se estima que un eléctrico estándar consume entre 15 y 20 kWh (kilovatios hora) cada 100 kilómetros, dependiendo de la eficiencia de manejo.

Si revisamos el cuadro tarifario de EDET, el precio promedio del kWh es de $ 1,80 (depende del bloque, este es un precio promedio). Entonces, para recorrer 100 km con el manejo menos eficiente, gastaríamos $ 36 en la factura de energía.

Un auto naftero estándar, muy eficiente, puede consumir alrededor de 7 litros de nafta cada 100 kilómetros. Si establecemos el precio del combustible a $ 20, tenemos un gasto de bolsillo de $ 140 cada 100 kilómetros, a una velocidad que no supere los 120 km/h.

De $ 36 a $ 140 hay una diferencia de casi cuatro veces, o sea que un auto eléctrico gasta (en dinero) una cuarta parte de lo que gasta uno a nafta. De todas maneras, fabricantes como BAIC sostienen que sus vehículos eléctricos insumen un gasto de dinero 10 veces menor que los nafteros, pero eso dependerá en gran medida de las tarifas de uno y otro combustible en cada país.

Al ahorro en combustible eso hay que sumarle una mayor vida útil del motor y un costo casi nulo de mantenimiento en el caso de los eléctricos, porque no hay que cambiarle filtros ni aceite.

Con un promedio de uso de 15.000 kilómetros por año, y siguiendo los cálculos anteriores, un conductor promedio gastaría $ 21.000 anuales en nafta, contra $ 5.400 en energía eléctrica.

Tipos de autos eléctricos.

 - Híbridos o HEV (hybrid electric vehicle, en inglés).

 Son vehículos con dos motores: uno tradicional a combustión y uno eléctrico. Hay diferentes sistemas, pero a grandes rasgos, el eléctrico recupera energía que de otro modo se perdería (como la energía cinética que se produce al frenar) y “ayuda” al motor a combustión, haciendo más eficiente el sistema en conjunto.

 Híbridos enchufables o PHEV (plug-in hybrid electric vehicle). Al igual que los híbridos tradicionales, funcionan con dos motores, pero en este caso el eléctrico es alimantado por un juego de baterías que permiten usar el auto en modo 100% eléctrico.

- Eléctrico a batería o BEV (battery electric vehicle).

Son los vehículos que funcionan con un solo motor eléctrico, alimentado a baterías que se recargan en un tomacorriente domiciliario o en estaciones de servicio de carga rápida.

- Vehículos eléctricos de pila de combustible de hidrógeno.

Son una alternativa a los vehículos eléctricos. En lugar de cargar grandes y pesadas baterías, se recurre a la energía almacenada en un depósito (o tanque) y gracias a la pila de combustible se obtiene energía eléctrica para hacer funcionar el motor eléctrico que moverá las ruedas.

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