Cómo es la vida del primer paciente que recibió dos trasplantes de cara

"El hombre de los tres rostros", así lo apodan a Jérôme Hamon. Tiene 46 años y hace un año su cuerpo rechazó el primer injerto.

EL HOMBRE DE LAS TRES CARAS. El francés perdió su cara por segunda vez a causa de un resfrío. FOTO TOMADA DE LA BBC EL HOMBRE DE LAS TRES CARAS. El francés perdió su cara por segunda vez a causa de un resfrío. FOTO TOMADA DE LA BBC
24 Abril 2018

Alguna vez ¿te imaginaste perder la cara? ¿Cómo serían tus días? ¿Cómo saldrías a la calle? Jérôme Hamon nunca creyó que le iba a pasar pero así fue. A causa de un resfrío, el francés de 46 años perdió el rostro y ocho años después se convirtió en la primera persona en el mundo en recibir dos trasplantes de cara.

El francés perdió su rostro en 2010 a causa de una neurofibromatosis tipo 1 que lo desfiguró. El primer trasplante que recibió fue de un hombre de 60 años, ese mismo año. Todo salió perfecto hasta 2015 cuando su nuevo rostro comenzó a deformarse luego de un resfrío. Es que los remedios que le suministraron fueron incompatibles con el tratamiento que estaba realizando para que su organismo no rechace su nueva cara.

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Los primeros signos aparecieron en 2016 y, un año más tarde, su rostro comenzó a mostrar indicios de necrosis por lo que los médicos debieron retirarlo.


"El hombre de las tres caras", así lo llaman a Jérôme en Francia, según publicó la BBC. Tres meses en el hospital y 16 horas de cirugía fueron necesarios para devolverle a Hamon parte de la normalidad de su vida. Durante ese tiempo permaneció internado sin poder ver ni hablar hasta que apareció un donante: un joven de 22 años.

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La última intervención fue realizada en un hospital parisino por el mismo especialista que llevó a cabo la primera, el cirujano Laurent Lantieri. Esta vez, para evitar el rechazo, los médicos tuvieron que reemplazar toda la sangre de su cuerpo, lo que llevó un mes más.

Actualmente, el francés no puede hacer movimientos con su rostro pero se espera que su cráneo y rasgos se vayan alineando gradualmente para que en poco tiempo pueda volver a gesticular.

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