Danny Rose, defensor de la selección de Inglaterra, le pidió a su familia que no asista al Mundial porque teme que pueda ser objeto de abusos racistas en Rusia.
“Le dije a mi familia que no quería que salieran por ahí debido al racismo y cualquier otra cosa que pueda suceder”, declaró el lateral izquierdo, de 27 años
“No quiero estar preocupado por la seguridad de mi familia mientras estoy tratando de prepararme para los partidos”, añadió Rose. El zaguero de Tottenham Hotspur fue víctima de cantos racistas cuando representó a la selección sub-21 de Inglaterra en Serbia.
Rusia se ha comprometido a combatir el racismo, pero los casos de actitudes racistas se han seguido reportando en el país previo a la Copa del Mundo. La Federación fue multada el mes pasado, a causa de las demostraciones racistas dirigidas contra algunos jugadores franceses durante un amistoso disputado en marzo.