En San Martín llegó la hora de cambiar

Si bien el torneo aún está en pañales y queda una eternidad por delante, la necesitad de una victoria es cada vez más grande en La Ciudadela. Vencer mañana a Gimnasia y Esgrima La Plata es una misión impostergable, algo que ningún mortal de Bolívar y Pellegrini piensa pasar por alto.

Por eso, Darío Forestello centró la semana en buscar la fineza en el tema fútbol, apuntalar la generación de juego y corregir aquellos errores que impidieron que San Martín pueda tener su primera alegría en la Superliga.

La Ciudadela casi que se cerró de manera hermética para la sesión de fútbol formal de esta semana. “Yagui” no quiso intrusos en esa práctica en la que se dedicó a probar las variantes para intentar que el equipo encuentre su mejor versión.

Así, si bien durante el entrenamiento modificó nombres y posiciones en más de una oportunidad, Álvaro Fernández, Adrián Arregui y Gonzalo Rodríguez parecen picar en punta para cambiar una ecuación que por ahora no cerró por Bolívar y Pellegrini.

“Sea cual sea la circunstancia del resultado vamos a ir sobre el trabajo, tratando de tener tranquilidad a partir de que ganemos”, explicó el DT poniendo paños fríos sobre algunas modificaciones. “No voy a tomar aliciente sobre rendimiento o no de algunos jugadores porque es lógico que algunos se están adaptando a la ciudad o a la categoría. Por eso no me desespero para nada”, agregó mientras su cabeza trabajaba a full buscando soluciones.

Por eso durante la sesión modificó las piezas que no estuvieron finas en la visita a Rosario Central. Así, dejaron el equipo titular Alejandro Altuna, Franco Costa y Emiliano Purita.

El caso del futbolista cuyo pase pertenece a San Lorenzo es, quizás, lo más llamativo porque tampoco tendrá un lugar en el banco de cara al duelo de mañana. Purita fue uno de los puntos altos en el “Gigante de Arroyito”. Cumplió en la función de interno derecho, fue una rueda de auxilio para Emiliano Albín y, cuando el uruguayo dejó la cancha, cumplió con creces la función de lateral por derecha.

Eso sí, los ingresos de Arregui, Fernández y “Turbo” pueden brindarle soluciones al entrenador del medio hacia adelante. El ex Temperley mostró buenas intenciones cada vez que le tocó ingresar. Es un cinco clásico, con mucho despliegue, rápido y aguerrido. Por eso, Forestello parece entender que puede bancar la parada en la mitad de cancha para “liberar” a los encargados de manejar el juego. Mientras tanto, “Palito” tiene buen panorama para la distribución y puede transformarse en el socio ideal que necesita el “solitario” Matías García.

Por su lado, Gonzalo intentará aportar lo que era su especialidad en la B Nacional y, hasta ahora, no pudo mostrar en la Superliga: explosión, velocidad y desequilibrio en los metros finales.

“En el fútbol siempre hay complicaciones, pero hay que saber superarlas; y acá lo importante es llegar bien al partido contra Gimnasia”, sentenció el DT pensando en el duelo más importante por estas hora, a pesar que en el horizonte aparezca Boca.

Forestello movió el banco esperando que el equipo reaccione y pueda lograr esa bendita primera victoria que, por ahora, viene siendo esquiva.