El defensor del pueblo, Fernando Juri Debo, vaticinó para Tucumán una “situación muy dura”, como consecuencia de la alta inflación y los cierres de las zafras más importantes: el azúcar y el limón. “La desocupación va a crecer a niveles exorbitantes. Creo que habrá una gran migración, un gran desarraigo de la gente, que optará por viajar a Mendoza y San Juan para trabajar en cosechas de otros cultivos”, enfatizó.
El funcionario realizó estas declaraciones, al evaluar el último índice de precios oficial. El Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec) confirmó días atrás una suba de un 6,5% en septiembre, alentado por el alza de las tarifas del transporte, junto con los rubros de alimentos y bebidas. Con este incremento, la inflación minorista acumulada en el año alcanzó a un 32,4%. Mientras que economistas estimaron que, en este mes, ese porcentaje subirá entre un 4% y un 5%. En Tucumán llegó a un 6,7% durante septiembre.
“Muchos preveíamos una inflación alta para el mes pasado, pero no creíamos que iba a llegar a ese nivel. Es sorprendente. Los incrementos en la luz, en el gas o en el transporte llevaron a esta inflación, que es realmente alarmante”, remarcó. En esa línea, Juri Debo hizo hincapié en que el salario, en promedio, varió entre un 33% y 35% en los dos últimos años, incluyendo la cláusula gatillo; mientras que la tarifa de un servicio público subió un 2.500%, por ejemplo. “Critican que la Defensoría del Pueblo presenta amparos contra estas medidas. Es lógico que vamos a hacerlo, si todos los días tenemos como termómetro social esta situación”, enfatizó. Y agregó: “ya no se trata de una queja por no querer pagar. Hoy, llegan a la Defensoría y aseguran que no pueden cubrir una factura, cuando de $ 500 pasaron a pagar $ 3.000 o $ 3.500”, manifestó el funcionario. “Un jubilado destina el 55% de sus haberes mínimos a pagar las boletas. Si a ello se le suma lo que gasta en medicamentos, destina el 70% de lo cobra. ¿Con qué come, con qué se viste, con qué puede hacer frente a la inflación?”, dijo.
Juri Debo marcó su posición en el marco de la presentación de una nueva herramienta tecnológica de la distribuidora Gasnor. Se trata de una aplicación móvil (app) para los usuarios, que se puede usar en cualquier dispositivo móvil. “Los clientes pueden adherir al servicio para solicitar la conexión sin necesidad de ir a una oficina de la empresa”, expresó Verónica Argañaraz, jefa gestión de Clientes de la empresa.