Seducido y abandonado: Real Madrid fue duro con Lopetegui

Julen Lopetegui jugó con fuego y se quemó. La gloria lo esperaba en el Mundial de Rusia pero él la desairó. El seleccionado español, ese equipo sensación que logró construir con paciencia y trabajo, generaba envidia y respeto entre sus rivales. La “Roja”, que durante la preparación goleó a Argentina 6-1, era favorita en las encuestas. Pero sucedió lo que nadie esperaba y todo se vino abajo. El ex arquero se dejó seducir por Real Madrid y no midió las consecuencias. El ex arquero de Rayo Vallecano pensó que podía jugar a dos puntas, pero se equivocó. Florentino Pérez, el todopoderoso presidente “merengue”, desafió a la Federación española. Anunció anticipadamente su contratación para reemplazar a Zinedine Zidane y estalló el escándalo.

En pleno Mundial, Lopetegui fue destituido. España entró en crisis y en octavos de final fue eliminado por el anfitrión. Pero lo peor estaba por venir para el DT. El sueño de dirigir al tricampeón de Europa pronto se convirtió en una pesadilla. Fue despedido apenas 137 días después de asumir. Nadie antes se marchó tan rápido.

En un fútbol resultadista, donde se mueven miles de millones de dólares y para que el negocio sea rentable hay que ganar hasta los amistosos, Lopetegui cometió demasiados errores. Aceptó las condiciones impuestas por el presidente del club, que vendió a Cristiano Ronaldo y se mostró austero en el mercado de pases. También se cargó la pesada mochila impuestas por el dirigente: había que ganar la Liga para cortar la supremacía de Barcelona y llegar a la final de la Liga de Campeones por cuarto año consecutivo porque Florentino quería ver a Sergio Ramos levantando otra vez la “Orejona” en el estadio de Atlético de Madrid, sede de la final 2019.

Dos objetivos que por ahora parecen difíciles de alcanzar. Real Madrid apenas sumó 14 puntos en la Liga (cuatro triunfos, dos empates y cuatro derrota) y ocupa el noveno lugar, algo impensado al comenzar la temporada. En Europa por ahora sigue en carrera, pero su andar es tambaleante.

“Es necesario cambiar la dinámica en la que se encuentra el primer equipo”, señala el comunicado del club. Uno de los párrafos es duro con el entrenador. “Existe una gran desproporción entre la calidad de la plantilla de Real Madrid, que cuenta con 8 jugadores nominados al próximo Balón de Oro, algo sin precedentes en la historia del club, y los resultados obtenidos hasta la fecha”.

Santiago Solari será el DT interino. “El Indiecito”, que tuvo un ciclo exitoso en el club como futbolista y es el técnico de Castilla, la filial de Real Madrid de donde surgió Zidane, dirigirá al menos el partido de mañana contra Melilla, por la Copa del Rey. Mientras tanto, la llegada de Antonio Conte se demora. El italiano no quiere repetir la historia de Lopetegui y puso condiciones para firmar. Quiere un delantero de jerarquía que le asegure goles al equipo y otro marcador central para adaptar el plantel a sus necesidades. Además, tendrá que renunciar a los 10 millones de euros que debe pagarle Chelsea si no consigue trabajo esta temporada.

Real Madrid atrae, enamora, Pero exige demasiado. Lopetegui se dejó seducir, pero lo abandonaron. Es la ley de este fútbol actual donde mandan los resultados. Pero fundamental es la ley de un club donde nadie perdona las derrotas. Lopetegui ahora lo sabe. Lamentablemente para él es demasiado tarde. La gloria se cansó y decidió no esperarlo más.