29 Mayo 2019
"Seré la jefa de la Policía", reiteró Silvia Elías de Pérez
La segunda ronda de preguntas en el debate de candidatos a Gobernador de Tucumán fue uno de los temás más sensibles en la provincia: "¿qué piensan hacer con el problema de la inseguridad?"
El primero en hablar, según lo establecido por sorteo, fue el actual gobernador, Juan Manzur, que se limitó a hacer un repaso de las medidas que tomó en materia de seguridad durante su gestión.
"El problema de la inseguridad nos afecta a todos por igual, sin ir más lejos mataron al diputado Olivares a metros del Congreso de la Nación. En nuestra gestión nos ocupamos de la seguridad: creamos el Ministerio de Seguridad, la Secretaría de Lucha Contra el Narcotráfico, sumamos 1.500 policías, e invertimos más de $ 500 millones en equipamiento, armamento y tecnología para la Policía. Ahora tenemos el terreno para la creación de una cárcel para 3.700 presos, en Benjamín Paz", detalló Manzur.
Luego fue el turno de los dos candidatos de la oposición, Ricardo Bussi y Silvia Elías de Pérez. En lo único que se pusieron de acuerdo a lo largo de todo el programa fue en esto: la necesidad de depurar la policía.
"Nuestro lema es que vamos a recuperar la paz en Tucumán. El Gobernador habla de una cárcel para 3.700 presos, pero necesitamos una para 10.000 delincuentes que nos tienen atemorizados. Podemos abrumar con cifras de seguridad, por ejemplo: en Tucumán hay un policía cada 200 personas y, en Jujuy, uno cada 100. Nosotros vamos a depurar la policía, porque hay mucha policía corrupta. Vamos a devolverle la infancia a los niños, para que puedan jugar en paz como lo hacíamos nosotros. Toda mi fuerza, mi voluntad y mi energía están puestas en recuperar la paz para los tucumanos", remarcó el referente de Fuerza Republicana.
Elías de Pérez (Cambiemos - Vamos Tucumán), en tanto, se dirigió directamente a Manzur. "Se lo digo de frente, gobernador: nos están matando. Yo defiendo la vida de los tucumanos, de los que no nacieron, de los que temen dejar la vida cuando salen a la calle. De las madres desesperadas porque sus hijos están presos de la droga. Por eso voy a ser la jefa de la Policía, no voy a delegar ni le voy a echar la culpa a nadie de lo que yo no haga. Voy a destruir cada uno de los kioscos de droga que hay en los barrios y en su lugar voy a dejar al estado presente. Ya no va haber policías buenos y policías malos, solo van a quedar los buenos, que van a tener todo lo que necesitan para poder afrontar este flagelo. Tucumán va a ser seguro".
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