17 Junio 2019

INGENIO SANTA BÁRBARA

El ingenio Santa Bárbara, en su origen, no estuvo entre los llamados “ingenios pioneros”. A partir de 1876, el ferrocarril ayudó a la expansión y a la concentración económica. Los industriales que no tuvieron posibilidades económicas de adquirir nuevos equipamientos debieron quedar forzosamente al margen del negocio ante la imposibilidad de competir con los modernos trapiches. Muchos, en 1872, debieron cerrar sus rudimentarias fábricas y venderlas junto con las tierras, mientras otros prefirieron convertirse en “cañeros” que proveían de materia prima a los ingenios. Surgen, en el medio, las colonias (la atención técnica exige la especialización de los cultivos), leyes impositivas, uso del crédito y la refinación a cargo de Alfredo Guzmán.Todo este éxito alentó una gran euforia en la industria azucarera. En este cuadro nació el ingenio Santa Bárbara en 1884, de la mano de Juan M. Terán. Pero, detrás de la euforia, aguardaban, vinieron dificultades. En 1902 una gran crisis de superproducción junto a la primera huelga obrera masiva que estalló en 1904. Hoy, crisis mediante, la “incertidumbre se adueña de los trabajadores de la fábrica azucarera” (LA GACETA). “Los trabajadores piden el pago de los sueldos adeudados y el comienzo de la zafra 2019”. “Los oferentes estarían dispuestos a hacerse cargo de la deuda que actualmente posee la fábrica, pero requieren celeridad en los trámites ante el avance de la zafra azucarera”. “La gente está desesperada”. Algo que seguramente, los dueños no conocen. La incertidumbre de no poder sustentar a la familia. “Creo que lo único que falta es que los accionistas firmen la autorización para la venta del paquete accionario”. Faltan, seguramente, muchas cosas. Lo primero de lo primero. Pase inmediato a un nuevo comprador y pago de salarios. De las euforias a la crisis, en la industria azucarera, sus trabajadores no tuvieron responsabilidades. Menos, en la primera, de participación.

Pedro Pablo Vera

EL CO2 Y LA ATMÓSFERA

Con rango constitucional se protege una serie de derechos donde el de mayor jerarquía, sin dudas, es el derecho a la vida, sin el cual carecen de sentido todos los demás. Lamentablemente ninguna de las tres principales fórmulas presidenciales pone como prioridad este derecho fundamental, que se ve amenazado por políticas antinatalistas y antifamiliares, e indirectamente por la agresión al hábitat natural necesario para la supervivencia de la especie humana. Respecto a lo segundo, resulta imprescindible controlar la cantidad global de emisiones que se suman a la atmósfera para limitar el aumento de la temperatura mundial, estableciendo un precio al CO2 que se adicione en ella, que promueva el desarrollo de tecnologías bajas en carbono. Esto podría lograrse por dos caminos: mediante un “impuesto”, que haría que la emisión de una tonelada de CO2 fuera más costosa en una cierta cantidad determinada por la política; o bien, a partir de un “enfoque comercial” (plan RenovaBio de Brasil), donde la política determinaría una cantidad máxima de emisiones de gases de efecto invernadero y luego asignaría o subastaría el derecho de emitir esa cantidad de CO2 a los emisores. El comercio de los certificados crearía un precio por cada tonelada de CO2 en el mercado. Se trata de una asignatura impostergable a asumir por el próximo gobierno.

Santiago José Paz

Chubut 2.900

Yerba Buena

PATRIOTAS

Felicito a LA GACETA por la iniciativa del festejo del Día de la Bandera, obsequiando nuestra “enseña patria” a sus lectores, para que flamee en casas, balcones y calles de nuestro país (no por la Copa América), rememorando a su creador Manuel Belgrano e instruyendo a los chicos y grandes sobre la historia argentina y sus “verdaderos patriotas”. Existen otros casos, a saber: San Martín, Güemes, los representantes del pueblo que firmaron el Acta de Independencia, bajo el seguro y garantía de sus vidas, haberes y fama. En su reciente aniversario, también valga un gran reconocimiento a “nuestros Héroes de las Malvinas”. El Presidente calificó a su compañero de fórmula como “un patriota que quiere lo mejor para los argentinos”. Hago varias salvedades al respecto: el resto de los políticos y/o gobernantes, ¿no son patriotas? Por definición, patriota es la persona amante y defensora de su patria. El nombre completo del creador de la bandera fue Manuel José Joaquín “del Corazón de Jesús” Belgrano. No es casual que junio sea el mes del Sagrado Corazón de Jesús ni que en el año 2005, se bordara en la Bandera Argentina el Sagrado Corazón de Jesús y se distribuyeran, en nuestro país, más de 50.000 estampas con la bandera argentina.

Marcos A. Machado

Tamaño texto
Comentarios
Comentarios