09 Agosto 2019
LO VELAN EN SU CASA. Familiares y vecinos de El Colmenar se acercaron a darle el último adiós al pequeño Benjamín. FOTO LA GACETA/HÉCTOR PERALTA
Momentos desgarradores se viven en El Colmenar primero desde anoche, cuando un niño de cuatro años fue hallado sin vida, y más aún desde esta tarde, cuando comenzaron a velarlo en la casa donde vivía.
Ulises Benjamín Amaya había desaparecido ayer temprano, cuando jugaba afuera de su casa. Más tarde, lo encontraron ahorcado en un puente de la zona.
La Justicia ordenó que se realice una autopsia para determinar las causas de la muerte, por eso la familia recién pudo comenzar a velarlo en horas de la tarde. Según se adelantó, le darían sepultura mañana antes del mediodía.
Mientras tanto, se informó que la división Homicidios de la Policía, a cargo de Christian Peralta, trabaja intensamente junto a equipos del Ministerio Público Fiscal para tratar de esclarecer el hecho.
"La muerte del niño en Las Talitas conmocionó a toda la sociedad tucumana, y por supuesto desde la institución policial se puso a gran parte del personal al servicio de la comunidad para tratar de llegar a buenos resultados y dar con el o los autores del hecho", explicó Peralta.
LÁGRIMAS Y PEDIDO DE JUSTICIA. Familiares de Benjamín Amaya exigen que el hecho se esclarezca. FOTO LA GACETA/HÉCTOR PERALTA
"Todavía se está trabajando sobre las diferentes hipótesis que surgieron y no se descarta ningún tipo de indicio. Aun así, a pesar de que se analizan todas las teorías, seguimos una clara línea de investigación", agregó, sin dar mayores detalles.
Esta tarde se realizaron pericias en el lugar donde fue encontrado el niño y se tomó testimonio a vecinos de la zona. También se analizó la ropa del pequeño, los elementos hallados en la escena del crimen y se realizaron los primeros estudios al cuerpo: los resultados preliminares confirmaron que falleció por estrangulamiento y en un principio no revelaron señales de abuso sexual.
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