CAPTURA DE VIDEO.
Lo buscaban desde el domingo, cuando lo señalaron como la persona que atropelló a un policía durante una persecución que se desató luego de un cortejo fúnebre en la ciudad de Yerba Buena. Finalmente, lo detuvieron hoy.
Se trata de un tal "Mandarina", de 32 años, quien tenía orden de detención por la causa lesiones, atentado y resistencia a la autoridad. Esta tarde la Policía allanó su domicilio y lo detuvo.
Según fuentes de la fuerza, "Mandarina" realizó disparos con un arma tipo tumbera mientras participaba de un cortejo fúnebre, por lo que se hizo presente la Policía para resguardar la seguridad de los vecinos.
Al finalizar el acompañamiento, alrededor de las 18, en el Cementerio Municipal, escapó de los efectivos de la Unidad de Investigaciones Norte que aguardaban por él y comenzó una persecución que finalizó en el barrio La Olla, donde vive el sospechoso.
Durante la persecución, el auto que conducía "Mandarina" fue alcanzado en Saavedra Lamas al 800 por el agente de la Patrulla Motorizada Cristian Maza. Cuando le ordenó al sospechoso que detuviera el auto, el joven golpeó la moto del efectivo policial provocando que este perdiera el equilibrio y quedará tendido en la calle.
El personal del GUM (Guardia Urbana Municipal), que colaboraba con la persecución, se encargó de atenderlo y trasladarlo en una ambulancia al Centro Asistencial Ramón Carrillo.
La huida de “Mandarina” continuó hasta su casa ubicada cerca del lugar conocido como La Olla, donde lograron interceptarlo y aprehenderlo junto a una joven que lo acompañaba. En ese momento comenzó una violenta pelea con los vecinos que habían acompañado al cortejo y los agredían arrojando piedras y con golpes de puño, por lo que los efectivos pidieron apoyo de Infantería y lograron controlar la situación. Todo quedó registrado en un video.
Dentro de la casa del acusado, un joven sacó un cuchillo y le produjo cortes en el codo derecho a otro de los agentes, llamado Francisco Figueroa, y en medio del brutal ataque “Mandarina” aprovechó para escapar.












