03 Enero 2020
REUTERS
BATEMANS BAY/MELBOURNE.- Decenas de miles de personas trataban de escapar ayer de las ciudades costeras de Australia asoladas por incendios forestales, mientras que buques y helicópteros de la Armada prestaban apoyo para evacuar a quienes quedaron aislados por las llamas.
Al momento, todo indica que el fuego se originó por la combinación de temperaturas récord, una sequía prolongada y fuertes vientos. Se trata 200 focos que consumen miles de hectáreas en los estados surorientales de Nueva Gales del Sur y de Victoria, y amenazan varias ciudades.
El gobierno de Nueva Gales del Sur declaró estado de emergencia a partir del hoy. Esto les brinda a las autoridades la potestad para realizar evacuaciones forzadas o asumir el control de servicios públicos.
La situación es tan grave que las Fuerzas Armadas están realizando evacuaciones masivas por aire y por mar en localidades costeras que quedaron acorraladas por las llamas. Una de ellas es la cuidad de Mallacoota, donde 4.000 personas quedaron atrapadas en las playas desde el lunes. Se espera que el buque militar HMAS Choules realice dos o tres viajes en los próximos días para rescatar a estar personas, de acuerdo a las autoridades estatales.
En otras partes del país se formaron largas filas fuera de los supermercados y de las estaciones de servicio, ya que los residentes y turistas intentaban abastecerse ya sea para pasar varios días aislados o para tratar de salir de las áreas urbanas. Esto está generando desabatecimiento de alimentos.
ESCENA INFERNAL. Las llamas y las columnas de humo se elevan por encima de la vegetación amenazada.
Más de 50.000 personas se encontraban sin electricidad y algunas localidades no tenían acceso a agua potable. “Todos estamos sumamente tensos”, dijo Shane Flanagan, un residente de Batemans Bay, situado en Nueva Gales del Sur.
Las autoridades australianas han instado evacuaciones masivas de varias ciudades de la costa sur, un área popular entre turistas para las vacaciones del verano austral, y han advertido que las olas de calor extremo que se prevén para este fin de semana podrían empeorar los incendios.
“Hoy la prioridad es combatir los incendios y evacuar, lograr que las personas estén a salvo”, dijo a periodistas en Sídney el primer ministro australiano, Scott Morrison.
Ya son 17 las víctimas fatales por los incendios que se vienen repitiendo en los últimos meses. Ademas, 18 se encuentra desaparecidas y miles de personas se preparan para evacuar las zonas afectadas por el fuego. (Reuters)
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