No hay plata para ayudar a Kicillof

Desde la gobernación de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Axel Kicillof, aseguraron que no hubo “sorpresa” por los dichos del ministro Martín Guzmán. El funcionario le aseguró el domingo al diario Clarín que no tenía previsto “hacer un salvataje financiero por U$S 250 millones el 26 de enero, el monto de vencimiento de capital que enfrenta el Gobierno bonaerense ese día”, lo que motivó un desplome de sus bonos en torno al 7%.

Es que, como sucede a nivel nacional, la situación financiera en la provincia de Buenos Aires es acuciante, según Kicillof. Antes del 26 de enero, esa administración tiene que afrontar vencimientos de deuda por U$S 571 millones. En todo 2020, son U$S 2.700 millones. De un total de poco más de U$S 11.000 millones que el gobernador heredó de la gestión de María Eugenia Vidal, con quien había tenido cruces durante la campaña por el monto exacto de la deuda bonaerense que, en la transición, entró en una zona gris. “Compartimos la preocupación por la falta de sostenibilidad de la deuda, como la necesidad de llevar adelante políticas de deuda que garanticen una solución de largo plazo”, aseguraron a a Infobae fuentes del Gobierno provincial.

Kicillof busca evitar un default de su primer vencimiento de deuda en dólares y, según fuentes allegadas a la jefatura de Gabinete, esperan que, a pesar de las declaraciones de Guzmán, desde el Ejecutivo nacional les den una ayuda.