Los 10 rugbiers que patotearon hasta matar a Fernando Báez Sosa en Villa Gesell irán mañana a la cárcel. Hasta hoy permanecieron detenidos en la comisaría de Pinamar, a la espera de las rondas de reconocimiento que terminaron hoy y en la que fueron identificados tres acusados más.
Desde mañana, los imputados en el crimen que sacudió al país entero esperarán su condena en el penal de Dolores, en la Unidad N°6. Según un informe de la Defensoría del Pueblo de Buenos Aires citado por TN, se trataría de una de las cárceles más sobrepobobladas del país: hay 958 reclusos para 422 plazas.
Las condiciones de hacinamiento y precariedad en el penal donde encerrarán a los 10 jóvenes de entre 18 y 21 años son extremas, según reportes de distintos organismos y medios de prensa de Buenos Aires. Sin embargo, fuentes cercanas al sistema penitenciario, aseguraron a la prensa que los chicos de Zárate no tendrán contacto con otros reclusos y que estarán en una zona con mayor protección. Esto, dicen las fuentes, no porque haya un pedido expreso, sino para no correr riesgos.
Lucas, Ciro y Luciano Petossi, Matías Benicelli, Máximo Thomsen, Ayrton Viollaz, Blas Cinalli, Juan Guarino, Enzo Comeli y Alejo Milanese son los 10 imputados que ingresarán por primera vez en sus vidas a un penal, quizás el de peor fama de la Argentina. Todavía no está claro quiénes serán juzgados como coautores y quienes como partícipes; lo que sí queda claro, según ha dicho el abogado querellante, Fernando Burlando, es que el grupo entero podría enfrentar la pena máxima, que es la prisión perpetua.