Medina Ruiz respaldó a Chahla y cargó contra Ocaranza: “repudio sus dichos”

La Municipalidad de la capital y el Ejecutivo provincial parecen haber salido de la cuarentena política que provocó el coronavirus y pasaron a la etapa de distanciamiento. Los cortocircuitos entre ambas jurisdicciones volvieron a materializarse debido a cuestionamientos principalmente sanitarios. A casi ocho meses de declarada la pandemia en el país, los funcionarios se hicieron a un lado barbijo para repartir acusaciones que hicieron crecer la curva de malestar. Incluso en funcionarios que no suelen involucrarse en cuestiones políticas, como Luis Medina Ruiz.

“Repudio los dichos sobre que el gobernador (Juan Manzur) se equivocó al elegir a la ministra para administrar la pandemia en Tucumán luego de ver el sacrificio personal, familiar y todo el trabajo que viene realizando desde el primer día”, dijo a LA GACETA el secretario ejecutivo médico de Siprosa en alusión a lo expresado por Rodolfo Ocaranza.

El secretario de Gobierno municipal había tildado de ingrata a la ministra, quien reprochó a la Ciudad el no haberse puesto a disposición en la pandemia. “El gobernador se equivocó en dejar que la ministra administre la lucha contra el coronavirus. Hoy estamos más pobres y más enfermos”, había dicho Ocaranza.

Medina Ruiz consideró que no se puede atribuir esas culpas a la funcionaria. “El mundo está más complicado. Tucumán, gracias a las estrategias de la doctora Chahla y de nuestros equipos, no llegamos a colapsar a pesar de ser la segunda jurisdicción más densamente poblada del país y tener prácticamente habilitadas todas las actividades; tengo un buen concepto de Ocaranza, me llama la atención sus declaraciones. No las comparto”, insistió.

El funcionario municipal consideró que “hay una ingratitud tremenda” de la ministra, y consideró que “la responsabilidad primaria de la asistencia de salud es de la provincia”. Y agregó: “es muy ingrata. Ante una cuarentena catastrófica se busca responsables afuera cuando la responsable es ella. Nosotros pusimos todo nuestro personal a disposición, estuvimos al lado de la provincia siempre. Hicimos operativos de prevención, cerramos plazas y parques, nos ocupamos del distanciamiento social con la Policía. No se lo puede acusar al intendente de mirar para otro lado”, advirtió el funcionario.

Medina Ruiz, a su vez, señaló que los agentes sanitarios de la provincia no son 7.000 como dijo Ocaranza, sino 872. “Hemos podido bajar la curva con muchos esfuerzos. La Provincia hizo un esfuerzo gigante con respecto al control de la epidemia, y el compromiso fue principalmente en la capital. No comparto para nada sus dichos; no lo esperaba de su parte”, concluyó.

Chahla había reprochado también que San Miguel de Tucumán aumentó una hora la atención de bares sin consultar al COE (Comité Operativo de Emergencia). “Eso me parece una falta de respeto también. Los directivos y los funcionarios debemos demostrar respeto por las instituciones. Nos enteramos a través de los medios de las disposiciones”, reprochó.

Ocaranza, en ese sentido, aclaró que el decreto presidencial autorizaba a cada jurisdicción a tomar las medidas necesarias. “No la vi a la ministra criticar al intendente de Banda del Río Salí (Darío Monteros) que permitía el cierre de comercios a las 21 cuando en toda la provincia era a las 18. Hay una intencionalidad política en todas estas críticas”, lanzó.