El funeral de Diego Armando Maradona en la Casa de Gobierno fue un desborde de fanáticos y admiradores que desfilaron durante todo el día para la despedida y, en simultáneo, constantes conversaciones entre la familia del "Diez" y las autoridades gubernamentales.
Ayer, cuando se conoció la noticia de la muerte de Maradona, el presidente de la Nación, Alberto Fernández, declaró duelo nacional por tres días y se comunicó con la ex esposa del astro, Claudia Villafañe, para poner a disposición de la familia todos los recursos y lugares necesarios para el velatorio del ídolo popular.
"Cuando pensé en abrir la Casa de Gobierno para Diego es porque desde estos balcones salió con la Copa del Mundo en 1986 y saludó en el Mundial '90. Y quiero que todos los argentinos que quieran despedirlo puedan hacerlo", dijo Fernández en una entrevista con la Televisión Pública.
Cerca de las 17 de ayer se confirmó oficialmente que el velatorio se realizaría en la Casa Rosada. A las 19, fuentes oficiales afirmaban que la ceremonia comenzaría a las 8 de la mañana. Finalmente, el velorio íntimo de familiares y amigos se desarrolló entre la 1.30 de la madrugada, hora en la que llegó el féretro desde la casa velatoria de La Paternal donde años atrás también habían velado a los padres de Maradona, Don Diego y Doña Tota, y las 6.
Villafañe fue la primera en llegar a Balcarce 50 junto a sus dos hijas Dalma y Gianinna. Hasta las 6, hora pactada para la apertura de las puertas al público, la familia tuvo un velatorio íntimo con pocos amigos y ex compañeros especialmente autorizados a ingresar, entre ellos varios integrantes del plantel campeón del Mundo en México 1986.
A las 6:17 se abrieron al público las puertas de la Casa Rosada, donde miles de personas pasaron a despedir al astro futbolístico durante pocos segundos. La fila había superado ampliamente la Plaza de Mayo, donde hubo vigilia durante toda la noche, y se extendía hasta la Avenida 9 de julio.
Entre las 10 y las 14, según trascendió, diversos funcionarios analizaron con la familia la posibilidad de extender el horario, que en principio estaba programado para las 16. El círculo íntimo de Maradona se mantuvo inicialmente firme en la idea de concluir la despedida en ese horario.
Cerca de las 14, la policía de la Ciudad cortó el acceso de público en la intersección de Bernardo de Irigoyen y Avenida de Mayo, primer retén de acceso al velatorio, y allí se registraron los primeros incidentes. Más tarde, los disturbios se trasladaron al sector vallado, comprendido entre ese punto y la Casa de Gobierno, donde se registraron corridas, gases lacrimógenos y detonaciones de balas de goma.
A las 14.35, desde Presidencia se comunicó que el cortejo fúnebre con el cuerpo de Maradona partiría a las 17 desde la Casa Rosada para transitar por Avenida 9 de Julio, Autopista 25 de Mayo y Acceso Oeste, de modo de facilitar la despedida a las personas q no pudieran acceder a la capilla ardiente para un último adiós. Respetando la decisión de la familia, estaba previsto que el velatorio culminara las 16:30.
Tras los incidentes y con la aprobación de la familia, Presidencia comunicó a las 15 la extensión del velatorio hasta las 19. Sin embargo, apenas 15 minutos después, se produjeron desmanes en el interior de la Casa Rosada, en el hall central y en el emblemático Patio de las Palmeras, al que lograron ingresar hinchas, lo que provocó el cierre del velatorio al público a las 15:30 y el traslado del féretro al Salón de los Pueblos Originarios.
Fuentes oficiales aseguraron a Télam que la hora de cierre del velatorio fue objeto constantes de conversaciones con los familiares de Maradona ante el incesante desfile de hinchas y fanáticos y, además, el interés de importantes personalidades de viajar al país, entre ellos el astro rosarino Lionel Messi y el presidente de la FIFA, el suizo Gianni Infantino.
Después de muchas idas y vueltas y de que la familia meditara los pasos a seguir, Claudia, las hijas de Diego y los más íntimos tuvieron un último momento a solas con el féretro, decidieron rechazar el traslado en helicóptero propuesto por Presidencia y, finalmente, pasadas las 17.45, salieron de la Casa de Gobierno para acompañar el cortejo fúnebre hacia Bella Vista para el último adiós. (Télam)