19 Marzo 2021
UN ENSAYO DIFERENTE. La Sinfónica de la UNT se prepara en el auditorio de la Facultad de Filosofía y Letras.
En una desierta Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Nacional de Tucumán, en la mañana del martes al canto de los pájaros del parque 9 de Julio se sumaron unos inusuales acordes de violines que atrajeron la atención de los pocos seres humanos que circulaban por los brillantes pasillos.
La música provenía del auditorio de esa casa de estudios, que albergó el primer ensayo de la Orquesta Sinfónica de la UNT, dirigida por Roberto Buffo, después de un año de forzada inactividad por el coronavirus.
Al estar el teatro Alberdi cerrado y en obras (por tiempo indeterminado), en medio de la pandemia la orquesta retomó su actividad para preparar el concierto de apertura de temporada que ofrecerá esta noche, a las 21, en el teatro San Martín (avenida Sarmiento 601), con entrada libre y gratuita. El Ente Cultural dispuso que en esa sala se alternen todos los viernes los conciertos de la Orquesta Estable de la Provincia y de la Sinfónica de la UNT.
El programa de esta noche fue armado especialmente para ensamble de cuerdas y se titula “De todos los tiempos”. Se escucharán Sinfonía sacra, de Gregorio Allegri; Pequeña serenata nocturna, de Wolfgang Amadeus Mozart; Valses op.39 de Johannes Brahms; Preludio y choro, de Heitor Villalobos y Tres Tangos, de Caminos Argentinos, la composición de Jeff Manookian.
Nuevo escenario
“Tocar en el San Martín nos soluciona un problema logístico muy grande porque en realidad todavía no hay fecha de reapertura del Alberdi”, comenta Buffo, y adelanta que en mayo la Sinfónica dará además conciertos en Yerba Buena.
“Con la aplicación de todo el protocolo correspondiente, tenemos que hacer presentaciones a cargo de grupos pequeños, lo cual condiciona decididamente el repertorio. En principio he dividido las cuerdas en dos grupos, de 25 a 30 músicos cada uno. Uno va a tocar hoy, porque hacemos música para ensamble de cuerdas desde el siglo XVII al XXI, es decir que abarcamos cinco siglos de músicas radicalmente diversas. No estamos acostumbrados a que toquen grupos tan pequeños, pero no hay otra alternativa. Estamos hablando musicalmente de los primeros románticos y tangencialmente en el romanticismo, y después el siglo XX, que plantea una exigencia técnica importante”, detalla.
Sin vientos
“Volver a tocar es un gusto -destaca-. No se puede creer que haya pasado tanto tiempo. Recuperar el training de tocar es importante. A este grupo de cuerdas lo volveré a ver en mayo porque en el ínterin haremos un concierto con la otra formación de cuerdas, y vamos a hacer un concierto de percusión en Filosofía y Letras. Cada recital va a tener mucha dinámica en el sentido de que la integración va a variar según qué toquemos y dónde lo hagamos. Todavía no puedo ensayar con los vientos en tanto no tenga los paneles separadores de plástico, pero ya tenemos planeados conciertos de estos instrumentos para más adelante en el año”.
El protocolo sanitario vigente contempla para el teatro San Martín el control sanitario de ingreso y egreso de público, aforo reducido y uso de barbijo permanente. Los espectáculos deben extenderse a un máximo de una hora, sin intervalos y no se reparten programas impresos ya que las obras se anuncian en pantalla.
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