“Esto no es un proyecto político: es una causa. Mi causa es luchar contra la postergación. Para pobreza están (Juan) Manzur y (Osvaldo) Jaldo: ellos son los responsables de tanta frustración”. En esos términos bramó en la tarde ayer Germán Alfaro, en el escenario de 360° plantado en el centro del club Central Córdoba, ante la multitud que asistió al lanzamiento de la campaña de “Juntos para Construir”, que compite en las PASO dentro de Juntos por el Cambio.
La diputada nacional Beatriz Ávila; el legislador Raúl Albarracín; el intendente de Bella Vista, Sebastián Salazar; la concejala de Bella Vista Ana Paula Quiles -esposa de Salazar-; el ex legislador y ex titular del Ente de Infraestructura Comunitaria Rolando “Tano” Alfaro; y el concejal de Concepción y titular del PRO Tucumán, Ramiro Beti, subieron a la tarima para las fotos y los saludos, entre papel picado, globos, pancartas y drones. Los últimos tres precedieron a Alfaro en los discursos.
“En Orán (departamento Leales) los vecinos no los conocen a (Pablo) Yedlin ni a Manzur: nunca los vieron por ahí. Y en Simoca le acabamos de conectar agua potable a una señora que nos dijo que estaba pronta a cumplir 97 años y que los iba a festejar tomando por primera vez en su vida agua potable de la canilla. (…) Hay un Tucumán olvidado por este Gobierno”, aseguró el “Tano”, candidato a senador suplente en primer término.
Quiles dio un mensaje dirigido a los jóvenes que no encuentran trabajo y a los profesionales que están precarizados en sus empleos. Y, especialmente, a las mujeres. “Tenemos miedo. Mientras en el Gobierno tienen peleas absurdas, a nosotras nos matan. Todos los días. No quiero eso para mis hijas, ni para las hijas de las tucumanas”, cuestionó.
Beti, que encabeza la lista de diputados, describió la situación provincial como “desesperante”. “Las prioridades de los tucumanos han sido olvidadas y abandonadas, y no por el Covid sino por la desidia del gobierno”, aseveró.
“No somos esto”
El discurso de Alfaro no tuvo una sola mención para sus competidores en las PASO del 14 de septiembre. Ni para elogiarlos ni para criticarlos. Por el contrario, se enfocó en todo momento en la descripción de la situación social y económica de la provincia y en el consecuente cuestamiento contras las autoridades de los poderes políticos.
“Somos hijos de esta tierra y a Tucumán la queremos como una madre, pero es una madre maltratada por los sucesivos gobiernos de distintos colores políticos. No merecemos vivir como estamos viviendo”, aseveró el intendente de la capital en el arranque de su mensaje, a las 16.35.
“LA GACETA publicó el martes que el 50% de los chicos no volvió a clases a pesar de que se reanudó la presencialidad (en las aulas). ¿Saben por qué? No por el Covid, sino porque sus padres no tienen (recursos) para la pilcha ni para los útiles para mandarlos a la escuela”, describió.
“En Villa Angelina me paró un vecino para decirme que está cansado de comer tortilla de papa y que no llega (con el dinero) para comprar carne. No puede ser que nos esté pasando esto a los tucumanos. Por eso a vos Manzur, a vos Jaldo, todos los que estamos acá les decimos basta. Basta de maltrato. Queremos vivir dignamente”, arengó.
Uno de los tramos más aplaudidos del discurso de campaña del jefe municipal fue, también, uno de los más severos.
“Me da lástima y es duro lo que voy a decir, pero es la verdad. Este gobierno, desde (José) Alperovich y Manzur, y ahora con Jaldo que pretende ser (gobernador), la única salida laboral que le ha dejado a los tucumanos es el narcotráfico -disparó-. Especialmente las madres que tienen que sostener el hogar y salen a vender esa porquería. No puede haber tanta descomposición social, no puede haber tanto desencuentro entre nosotros, los tucumanos. No puede ser que nos estemos matando entre nosotros. No somos esto los tucumanos”, concluyó el candidato a senador nacional.