El presidente del Partido Justicialista de Provincia de Buenos Aires, Máximo Kirchner, envió un mensaje de unidad en la interna que atraviesa el Frente de Todos (FDT), a partir de las tensas relaciones entre sus máximos líderes, el presidente Alberto Fernández y la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Sin embargo, el diputado nacional de La Cámpora -e hijo de CFK- volvió a evidenciar las diferencias dentro de la coalición gobernante, al expresar sus críticas hacia el plan económico implementado por la Casa Rosada.
El discurso de Máximo Kirchner tuvo lugar durante un acto de asunción de la conducción de la regional Oeste de la CGT en Merlo. Ante unos 90 delegados, y en un mitin con fuerte presencia sindical, el ex jefe del bloque oficialista de Diputados sostuvo que, en la gestión de gobierno, "no se trata de resistir", sino "de avanzar". “Nadie más que nosotros y nosotras queremos la unidad”, añadió el referente de La Cámpora, según consignó Infobae.
En ese marco, el hijo de CFK destacó el valor del kirchnerismo en el armado de la alianza peronista que derrotó a Mauricio Macri (JxC) en las últimas presidenciales. Aunque lo hizo con dardos al rumbo económico del país.
“Fuimos la base de la construcción de la unidad en 2019 y también en 2017 cuando nos miraban de costado y pensaban que era historia terminada. Siempre nos dijo Cristina: confiar en la gente y nosotros confiamos y pudimos construir esa unidad. No creo que ningún trabajador quiera la unidad para ir en contra de sí mismo. La unidad es para que no sea casi imposible llegar a fin de mes, es para construir más y mejores viviendas”, agregó.
Kirchner sostuvo que, en sus espacio, saben “que gobernar no es soplar y hacer botellas". "Vi al ex presidente (Néstor) Kirchner gobernar en una situación muy difícil y lo mismo a la ex presidenta Cristina que le tocaron situaciones muy difíciles y se paró de manos. Que no nos vengan a explicar lo que son situaciones difíciles”, arremetió el diputado nacional.
Por otro lado, se refirió también a las dificultades del gobierno en 2013 y lo que costó crecer en aquel contexto: “Sabíamos que no había que retroceder ni un centímetro. La presión de los mercados que deben ser los mismos que lo hicieron con el gobierno para que tome decisiones con respecto al FMI nos hicieron devaluar pero luego lo recuperamos. Estaba Axel (Kicillof) en el Ministerio y Augusto Costa en una Secretaría de Comercio potente apoyada por la Presidenta”, recordó.
“Es verdad que la pandemia nos trajo muchas dificultades pero no nos puede ganar la autocompasión. Hay que construir fuerzas para recuperar el poder adquisitivo del salario. Abel (Furlan) me contaba que un trabajador de la UOM ganaba unos 2.000 dólares a fines de 2015 y hoy ganan 900; el compañero Correa me dijo que eran 1.500 dólares y ahora les pasa lo mismo que a los de la UOM”, expresó Kirchner.
Además, aludió al contexto internacional y local, y pidió seguir fortaleciendo cada espacio. En ese sentido, valoró la organización sindical y afirmó que “los diputados y diputadas que representan a los trabajadores siempre fueron indoblegables”. Recordó el proyecto de Ganancias impulsado junto a Sergio Massa y el impacto en los trabajadores que dejaron de pagarlo: “Imaginen lo que sería 1.500.000 trabajadores más pagando ganancias con los precios como están”.
Entre los presentes se encontraban, Abel Furlan, el flamante secretario general de la UOM, Omar Plaini de Canillitas; y el nuevo triunvirato de la regional conformado por José Medina de Camioneros; Walter Correa (Fatica) y Luján Cotone de SADOP. También estuvieron el gobernador Axel Kicillof, Gustavo Menéndez, la intendenta de Merlo, Karina Menéndez y su par de Moreno, Mariel Fernández.