Con un auto de IndyCar, la F-1 de EEUU hará una prueba en el autódromo de Las Termas

Agustín Canapino girará mañana con un Chevrolet Dallara y le dará más alas al sueño santiagueño de traer a la categoría a su pista.

LA PREVIA. Agustín Canapino giró el fin de semana en el autódromo Oscar y Juan Gálvez. LA PREVIA. Agustín Canapino giró el fin de semana en el autódromo "Oscar y Juan Gálvez".
08 Noviembre 2022

Desde hace varios meses se sabe del interés de las autoridades del Gobierno de Santiago del Estero por traer al autódromo de Las Termas a la IndyCar, la segunda mayor categoría mundial de autos monoposto. Mañana, miércoles, desde las 14, habrá un “aperitivo” al respecto. Será cuando el arrecifeño Agustín Canapino se suba a un Chevrolet N°77 para efectuar pruebas libres. El espectáculo, se anuncia, será gratuito y además contará con un show extra con artistas y D’js invitados en las cercanías de las tribunas VIP. La actividad se extenderá de 14 a 20.30.

El coche que manejará “Canapa” tiene un chasis Dallara y pertenece a la escudería Juncos Hollinger Racing, propiedad de Ricardo Juncos, un bonaerense oriundo de la localidad de San Fernando.

Con ese mismo auto, Canapino estuvo girando el pasado fin de semana como parte del espectáculo montado por el Turismo Nacional para la “Carrera de los 200 pilotos”, en el autódromo “Oscar y Juan Gálvez”, de Buenos Aires.

Tanto con la presentación porteña, como con la termense, se quiebra una espera de 51 años para volver a ver en territorio argentino un bólido de la categoría. La única vez que se presentó en el país fue el 28 de febrero de 1971, con las “300 Millas de Rafaela”. Fue la primera vez que la categoría estadounidense tuvo una fecha puntuable fuera de su país. 

El único argentino que corrió fue el recientemente fallecido Carlos Alberto Pairetti, que culminó 9° por suma de tiempos. La IndyCar empezó su larga historia en 1911. Es la categoría más longeva del mundo.

Como parte de su preparación para las pruebas en Argentina, Canapino participará de una competencia comunitaria en Sebring, el 12 de octubre. El arrecifeño ya corrió para el equipo de Juncos en las “24 Horas de Daytona”, en enero de 2019 con un prototipo Cadillac. Terminó 30°.

La Juncos Hollinger Racing es una escudería que participa en diversas categorías en Norteamérica. Empezó en el estado de Florida, con el karting. Su siguiente paso fue llegar a la IndyCar, por medio de sus categorías menores: Indy Pro 2000 e Indy Lights. 

Con el tiempo se trasladó a Indianápolis y dio el salto a la IndyCar. Debutó en las 500 Millas de Indianápolis de 2017. Tras la asociación de Juncos con Brad Hollinger, el team regresó en 2021. Ya en esta temporada, participa de forma completa con el piloto inglés Callum Ilott.

Agustín Canapino Agustín Canapino

La idea macro santiagueña es traer la IndyCar, probablemente para la temporada 2024. Al respecto, se vienen dando pasos lógicos. El gobernador Gerardo Zamora presenció el año pasado las “500 Millas de Indianápolis”. En la oportunidad, se reunió con su par del estado de Indiana, Eric Holcomb. El encuentro fue promovido por Juncos. 

Las versiones en el ambiente de los motores indican que, de concretarse la llegada de la categoría estadounidense, Las Termas quedará más cerca de lograr su mayor sueño: tener a la Fórmula 1 en su trazado.

¿Cuánto cuesta traer a la IndyCar a la Argentina? 

Sólo hay una referencia, cuando el propio Juncos intentó en 2018 que San Juan y su autódromo El Villicum la reciba. En aquel momento se habló de U$S 5,5 millones por año, en un contrato por tres temporadas. El monto incluía los derechos de retransmisión televisiva a nivel local en la temporada previa y durante la extensión del contrato. 

También la difusión del turismo argentino en el marco de las “500 Millas de Indianápolis”. El extra fue que, por U$S 500.000 adicionales, se aseguraba la presencia de un piloto argentino en la pista.

Por el momento, la IndyCar está sin competir fuera de Norteamérica; al anunciar su calendario 2023, presentó 17 competencias, todas en trazados de EE.UU. de óvalo, callejeros o mixtos. En su historial, registra presentaciones en Japón, Brasil, Australia y México.

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