¿Qué necesitan Manzur y Morales para posicionarse en el escenario nacional?

El tablero de la política nacional va tomando forma de cara a los comicios nacionales que definirán quién es el o la responsable de conducir los destinos del país durante los próximos cuatro años. En este terreno en pugna, algunos espacios tienen resuelto algunos aspectos vinculados a futuras candidaturas, pero en otros sectores la incertidumbre sigue reinando. En Juntos por el Cambio (JxC), los proyectos encabezados por Patricia Bullrich, presidenta en licencia del partido PRO, y Horacio Rodríguez Larreta, jefe de gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), parecen ser los que corren con mayor posicionamiento e instalación para afrontar las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) del 13 de agosto. Un poco más atrás se encuentra el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, con el apoyo mayoritario de la Unión Cívica Radical (UCR). Por su parte, en el oficialismo se avizora un panorama más convulsionado a raíz de la profunda discusión interna y los renunciamientos que hicieron Cristina Fernández de Kirchner y Alberto Fernández. De hecho, algunos dirigentes como Agustín Rossi y Daniel Scioli comunicaron su intención de competir por la presidencia, luego del anuncio del mandatario nacional.

Inmersos en esta realidad, algunos dirigentes norteños como Juan Manzur y Gerardo Morales afrontarán procesos electorales previos en sus respectivos distritos y los resultados que obtengan serán determinantes para el futuro. Sin lugar a dudas, mayo puede resultar un mes bisagra para los gobernadores de Tucumán y Jujuy porque los votos obtenidos pueden servirles de trampolín para buscar el sillón de Rivadavia o la presidencia de la Cámara de Senadores.

Proceso de larga data

Antes de presagiar futuros e hipotéticos escenarios electorales, el analista político Luis Karamaneff dijo que antes de la definición de candidaturas es importante observar el proceso de “provincialización” que experimenta la política argentina desde hace años. “Antes, la competencia electoral solía ser bastante similar en todo el territorio nacional porque uno tenía a la UCR y al peronismo y casi todo se disputaba ahí. Existía una alineación territorial. Por el contrario, hoy tenemos provincias que se van cerrando, donde sus gobernantes se limitan a trabajar cuestiones estrictas de sus territorios”, aseguró el licenciado en Ciencias Políticas. Y detalló que este fenómeno, donde hay una tendencia al aislamiento sobre las presiones nacionales, permite articulaciones y acuerdos políticos que parecerían imposibles desde lo ideológico. Para el especialista, todo esto es producto de la fragmentación del sistema político y de que los grandes partidos nacionales adoptaron políticas que fracasaron. “Tiene sentido que los dirigentes provinciales se desacoplen de los procesos nacionales porque a partir de ese momento pueden tener proyección, pero esto también puede ser engañoso si miramos las posibilidades de los dirigentes de CABA o la provincia de Buenos Aires y los del resto”, enfatizó a LA GACETA.

Espacio clave

Teniendo en cuenta las diferencias que pueden experimentar los dirigentes a partir de la exposición política y mediática, Karamaneff puntualizó que los mandatarios de provincias como Tucumán o Jujuy tienen espacios con capacidad de incidencia en la política nacional a través de los legisladores nacionales. “El espacio natural de acuerdos es el Senado y ahí es donde pueden hacer valer el peso de sus representantes. La conformación del Norte Grande es muestra de esto porque se trazó un diseño institucional donde los gobernadores del norte pueden proyectarse. Son 10 provincias, con tres senadores cada una, o sea, tienen 30 senadoras en un cuerpo de 72 integrantes y así tenés capacidad de veto, capacidad de incidir y de iniciativa”, dijo el analista. Y destacó que durante su paso por la Jefatura de Gabinete de Nación, Juan Manzur trató de sacarle el mayor rédito posible, pero sin un resultado positivo contundente.

Para Karamaneff, las aspiraciones políticas de Manzur y Morales no solo se detienen en la candidatura presidencial porque ambos dirigentes no esconden ni rechazan de forma contundente la posibilidad de ser compañeros de alguien más en una fórmula.

En relación al debate interno que afronta el kirchnerismo, el analista destacó que las candidaturas surgidas hasta ahora no generaron suficiente adhesión en el electorado ni dentro del espacio. Y ante esto, por ejemplo, el gobernador Manzur busca apoyo de distintos sectores de negociación política -empresariales y sindicales- para colarse en alguna fórmula.

Algo más que votos

El próximo 7 de mayo, Gerardo Morales competirá en los comicios de su provincia como candidato a convencional constituyente y apuesta a un triunfo contundente de su espacio para demostrar a sus correligionarios y socios políticos que la precandidatura presidencial no resulta caprichosa. Sin embargo, el docente en Ciencia Política, Claudio Gareca, advirtió que además de una importante cantidad de votos, el mandatario jujeño deberá mostrar otros diplomas en su carrera hacía la Casa Rosada. “Por supuesto que Morales necesita buenos resultados para darle continuidad a su proyecto y necesita esto para mostrar que pudo transformar la provincia y darle un nuevo cariz a la cuestión política y económica. Pero también debemos tener en cuenta que la realidad económica es compleja en la provincia”, dijo el analista jujeño y puntualizó que el último informe de la Dirección Provincial de Estadística y Censos de la Provincia (Dipec) de Jujuy indicó que la inflación provincial de marzo fue del 8,7%, es decir, un punto por encima de la media nacional (7,7%).

En su análisis del contexto jujeño, Gareca enfatizó también que en el último tiempo, la dirigencia local del PRO demostró un fuerte apoyo a la figura Rodríguez Larreta y no resultaría descabellado en este esquema una posible alianza entre el jefe de Gobierno porteño y el Gobernador de Jujuy. “Creo que no resulta azaroso el impulso de la campaña de Rodríguez Larreta en la provincia porque si de alguna manera no llegara a ser factible la participación de Morales en la interna de JxC, él podría jugar un papel importante en el armado del dirigente del PRO”, concluyó.