Por Daniel Alfredo Coronel
17 Mayo 2023
Tocó fondo. El presente de Atlético no resiste análisis. La única buena noticia para los cientos de “decanos” que viajaron a Santa Fe -con todo lo que eso implica con la economía actual- es que peor de lo que jugó anoche no se puede jugar. Los últimos 15 minutos fueron similares a una película de terror, donde al protagonista principal le pasa lo inimaginable cuando la situación parece estar controlada.
Los primeros 20 minutos auguraban un buen partido del conjunto tucumano. Esos minutos del partido fueron frenéticos, Atlético se adueñó de la pelota, dispuesto a asfixiar a Estudiantes de Río Cuarto. que aguantó como pudo cada uno de los ataques que propuso el equipo de Lucas Pusineri.
El “decano” fue una tromba, Braian Guille le otorgó agilidad y desequilibrio a los últimos metros. El ex Olimpo estuvo incontrolable. Por izquierda y por derecha gambeteó con picardía para darle forma a su mejor partido con la camiseta de Atlético, que coincidió con su primer juego como titular.
Un cabezazo de Matías Orihuela, dos buenos desbordes de Guille que no encontraron receptor en el punto penal y una volea de Cristian Menéndez fue lo más claro para Atlético. Pero el rival también jugó, y cuando pudo acomodarse en el terreno complicó al “decano”. De hecho, Luis Ojeda tuvo que revolcarse de lo lindo para que el partido continuara 0-0.
Luego de varias idas y vueltas, Pusineri se decidió por hacer descansar a más de la mitad del equipo y la apuesta le salió mal.
El DT armó un mix en el “11” titular, y en relación al partido con Argentinos solo mantuvo a Marcelo Ortiz, Matías Orihuela, Guillermo Acosta y Cristian Menéndez. El resto de equipo fue completado con jugadores con piernas frescas, para tratar de buscar el pase a los 16.vos de final de la Copa Argentina.
En el complemento la historia cambió de manera drástica. El “decano” salió dormido y le costó casi 10 minutos en meterse en el partido. Hasta eso, el “león” estrelló una pelota en el travesaño y exigió a Ojeda a otras dos intervenciones.
Cuando Atlético era peloteado por el conjunto cordobés, apareció Ramiro Ruiz Rodríguez, con una buena corrida -de las que acostumbró al hincha en 2022- para abrir el marcador y llevar ilusión (que duró apenas 15 minutos) para el hincha “decano”.
El gol de Renzo Reynaga a los 28 fue la piña que noqueó al “decano” y de la que nunca pudo reaccionar. A partir de ese gol, el equipo quedó entregado a la voluntad del “león”, que olfateó sangre y saltó a yugular. En apenas 15 minutos Atlético pasó de ganar a perder por 3-1 con errores impropios de un plantel de Primera.
El segundo de Reynaga y el tercer gol de Guillermo Villalba estaban cantados. En los últimos minutos, Atlético fue un concierto de errores y terminó quedándose con las manos vacías después de haber jugado un primer tiempo bueno.
“Vamos a poner de nosotros para defender una idea y poder sumar y salir de las derrotas, necesitamos recuperar credibilidad en nosotros mismos”, dijo Pusineri, todavía golpeado en rueda de prensa. “No me gusta la imagen que terminamos dando. Siento una tristeza profunda por no poder pasar a la próxima fase”, agregó.
El plantel llegará alrededor de las 9.30 al Complejo y tendrá una práctica liviana, luego del viaje en ómnibus. El entrenamiento estará comandado por Pusineri, que dejó en claro que no dará un paso al costado. “No me pongo plazos, será una cuestión de charlar con los directivos, nosotros no estamos atados a los puestos de trabajo”, advirtió. No obstante, habrá que estar atento a lo que pueda pasar con las reuniones que podría tener la comisión directiva durante el día de hoy.
Lo más popular
