WASHINGTON, Estados Unidos.- El ex presidente de Estados Unidos Donald Trump admitió que desestimó las opiniones de sus propios abogados al seguir impugnando su derrota de 2020 porque no los respetaba. En una entrevista emitida ayer amitió que se había hecho la idea de que las elecciones habían sido “amañadas”, afirmación falsa que sigue haciendo.
Trump, favorito a la nominación republicana para enfrentarse al presidente demócrata Joe Biden en las elecciones de 2024, afronta ahora cuatro procesos penales, incluidos dos relacionados con sus intentos de anular su derrota de 2020 ante Biden.
“Fue mi decisión”, dijo Trump al programa “Meet the Press” de la NBC, insistir en que las elecciones estuvieran “amañadas” contra él, y añadió que se basó en gran medida en sus propios “instintos” para llegar a esa conclusión.
Trump sigue afirmando falsamente que le robaron las elecciones mediante un fraude electoral generalizado.
Consultado sobre por qué desestimó la opinión de los abogados de la Casa Blanca y de su campaña de que había perdido las elecciones, Trump respondió que “porque no los respetaba”.
El ahora candidato republicano señaló al ex fiscal general de Estados Unidos William Barr, que le dijo que había perdido las elecciones, como uno de los abogados cuyo consejo no siguió.
“Escuché a algunas personas -dijo-. Tipos como Bill Barr, que era un duro, pero no estaba allí en ese momento. No hizo su trabajo porque tenía miedo”.
Trump se ha declarado no culpable en los cuatro casos penales, incluido un proceso federal en Washington y una acusación en el estado de Georgia que involucran a sus intentos de reclutar una lista de electores falsos para la certificación del Congreso de los resultados de las elecciones de 2020.
Sus comentarios de ayer podrían socavar una de sus posibles defensas legales: que se basó en el consejo de sus abogados para seguir impugnando su derrota. Los tribunales estadounidenses desestimaron decenas de impugnaciones legales de la campaña de Trump y sus aliados tras las elecciones de noviembre de 2020.
Una premisa central del caso, según la acusación del abogado especial Jack Smith, es que Trump sabía que sus afirmaciones eran falsas después de que sus asistentes cercanos le dijeran que había perdido, pero las difundió de todos modos para que parecieran legítimas, todo al servicio de una supuesta conspiración criminal.
Sus afirmaciones fueron una incitación para que sus partidarios invadieran el edificio del Capitolio meses después, el 6 de eenero de 2021, para evitar que los legisladores certificaran que Biden había ganado las elecciones.
“Estuve escuchando a diferentes personas, y cuando lo sumé todo, las elecciones estaban amañadas”, dijo Trump a Kristen Welker en la entrevista, en la que volvió a insistir en la falsa afirmación mientras busca la designación republicana para presidente en 2024.
“¿Sabes a quién escucho? A mí mismo. Yo vi lo que pasó”, dijo Trump. Añadió que no escuchó a sus abogados porque no los respetaba, según confirmó la cadena estadounidense CNN, sobre la entrevista.
“Los contratas, nunca has conocido a estas personas, recibes una recomendación, resultan ser RINOs (republicanos sólo de nombre, en inglés), o resultan no ser tan buenos. En muchos casos, no los respeté”, afirmó, y añadió: “Pero sí respeté a muchos otros que dijeron que las elecciones estaban amañadas”.
La investigación federal de Smith sobre la interferencia electoral es uno de los cuatro casos penales contra el ex presidente. En el caso de Smith, el ex mandatario enfrenta cuatro acusacines, incluida la obstrucción de un procedimiento oficial y la conspiración para defraudar a Estados Unidos.
Trump también fue acusado en un amplio caso de Georgia que lo acusa de ser el jefe de una “empresa criminal” para anular las elecciones de 2020. El ex mandatario se declaró inocente en todos los casos. (Reuters-Especial)