Como tucumano políticamente independiente que en estos últimos años apoyó a Juntos por el Cambio, leí con gran satisfacción la noticia, publicada en LA GACETA, de que el señor Mariano Campero votará y ayudará a Milei en los próximos comicios. Estaba convencido que toda la dirigencia de ese espacio político tendría el mismo gesto de grandeza y humildad que tuvieron Patricia Bullrich y Petri pidiendo el apoyo a Milei, porque es la única opción de cambio y de frenar al kirchnerismo que, corrupción mediante, nos llevó al pozo donde estamos. Debo confesar que grande fue mi desilusión cuando vi que muchos dirigentes de Juntos por el Cambio no solo se declararon neutrales, con la tremenda ventaja que eso significa para el candidato Massa, sino que, también, hubo quienes pidieron votar a ese candidato. Sentí que me dejaron solo frente a la maquinaria electoral del oficialismo, defraudado, abandonado. Lo que manifiesta Campero es, precisamente, lo que muchísimos argentinos queremos de la dirigencia de Juntos por el Cambio, que apoye en estas elecciones a Milei y en el Congreso sea la oposición que controle la calidad y razonabilidad de los proyectos que se presenten. Finalmente, quiero felicitar al señor Campero por su compromiso con nuestro país y agradecerle que haya sabido interpretarnos a los ciudadanos que hemos apoyado a Juntos por el Cambio.
Rodolfo Gerardo Ezquer rezquer@gmail.com