En el café o el té que tomás por la mañana. en tu bebida energética favorita y en muchas gaseosas populares la cafeína presente les da al cuerpo y al cerebro un impulso muy necesario si nos sentimos aletargados. Pero hay dudas: ¿cuánta es demasiada cafeína y qué tanto importa de dónde la obtenemos?.
Funciones corporales, como la frecuencia cardíaca, el flujo sanguíneo y los ciclos de sueño-vigilia, se ven afectadas por la adenosina, una sustancia química que se produce naturalmente en el cuerpo y cuya función es hacernos sentir cansados al final del día. Cuando consumimos cafeína, esta se absorbe rápidamente en el torrente sanguíneo, donde compite con la adenosina y le impide conectarse a estos receptores y hacer su trabajo. Por eso consumir cafeína nos hace sentir más despiertos y alertas. También aumenta los niveles de otros neurotransmisores, como la dopamina y la adrenalina, lo que puede hacerte sentir más estimulado, dice Damian Bailey, profesor de fisiología de la Universidad de Gales del Sur, en Reino Unido, en un artículo que publica la BBC Mundo.
Ahora bien, una revisión general que analizó más de 200 metaanálisis en 2017 encontró que beber de tres a cuatro tazas de café al día se relacionaba más a menudo con beneficios para la salud que con daños, y que los estudios que encontraron asociaciones perjudiciales podrían explicarse por la mayor proporción de bebedores de café que fuman.
Sin embargo, un área donde las cosas pueden tener algunos matices es la salud del corazón. Un estudio de casi 19.000 personas encontró que, si bien beber más de dos tazas de café al día estaba relacionado con un mayor riesgo de muerte por enfermedades cardíacas entre las personas que ya tenían presión arterial alta, este no era el caso entre aquellos con presión arterial saludable.
Y en una revisión de la evidencia, los científicos dicen que, si bien el consumo moderado de café puede reducir el riesgo de muerte, presión arterial alta e insuficiencia cardíaca, no se encontró efectos claros sobre el riesgo de enfermedad coronaria.
Los estudios demuestran que el café también puede tener un efecto sobre qué tan bien hacemos ejercicio. Un trabajo sobre ciclistas aficionados concluyó que mejora el rendimiento físico hasta en un 1,7%.
Flujo sanguíneo al cerebro
La cafeína también se ha asociado con un menor riesgo de varias formas de cáncer, enfermedades cardíacas y diabetes tipo 2. Otra investigaciones han asociado el consumo de cafeína con hasta un 60% menos de riesgo de desarrollar Alzheimer. Una explicación para esto es que la cafeína mejora el flujo sanguíneo al cerebro, dice Bailey.
El café también se ha asociado con composiciones saludables de microbios intestinales, en parte gracias a los polifenoles bioactivos y compuestos alcaloide -entre los que se encuentra la cafeína- que contiene. Y ya se sabe que la composición adecuada de la microbiota intestinal puede tener efectos generalizados en nuestra salud.
La infusión que puede reemplazar al café: ayuda a adelgazar y combate el estreñimientoNo obstante, la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) aconseja a las personas sanas que no beban más de 400 mg al día y no más de 200 mg en una sola bebida. La cafeína, además, está desaconsejada en las personas que cursan un embarazo o entre las que están amamantando.