El domingo pasado visité el Cementerio del Norte; una expedición bastante nefasta, ya que observé el estado deplorable en el que se encuentra, a saber: monumentos derruidos vandalizados al punto de no tener identificación alguna, acceso a los mismos destruidas, etc. La falta de seguridad es ¡tan evidente! En resumen: Un cementerio en abandono total. Es necesario que las autoridades encargadas tomen cartas en el asunto no sólo en fechas en las que los deudos solemos ir a rendir respeto a nuestros deudos.
Lucrecia Medina
México 49 - S. M. de Tucumán