La danza de nombre sobre el posible reemplazante empezó a rondar en el mundo Boca. Guillermo Barros Schelotto, Fernando Gago y ahora se sumó Rodolfo Arruabarrena son algunos de los candidatos que trascendieron para reemplazar a Diego Martínez. Una tarea de suma complejidad debido a que tendrá el difícil objetivo de buscar un cupo para la Copa Libertadores 2025, meta que el “Xeneize” no concretó por ninguna de las vías disponibles y que todavía tiene dos chances: la tabla anual o la Copa Argentina. Todo esto provoca que el futuro del “Xeneize” esté repleto de incógnitas.

A priori, la principal resolución del Consejo de Fútbol fue que Mariano Herrón asumiese como interino para el próximo partido del “Xeneize” –será el domingo frente a Argentinos Juniors en La Bombonera-. Así dará inicio a su tercer interinato: ya dirigió siete partidos –ganó tres, empató dos y perdió dos-.

Sin embargo, el Consejo de Fútbol ya se puso en contacto con el “Vasco” para dar inicio al segundo ciclo en el club de la “Ribera”, aunque la situación no parece fácil. Claro; el DT asumió hace dos meses como entrenador de Al-Taawon FC de Arabia Saudita –firmó por un año-, después de un efímero paso por la Selección de Emiratos Árabes Unidos. “Tengo sentido de pertenencia y obviamente me gustaría volver a dirigir”, había dicho Arruabarrena en una entrevista con TNT Sports en 2021. Es decir, el deseo existe, pero la traba contractual podría ser una piedra en las posibles negociaciones.

Gago es otra de las opciones que se posiciona como reemplazante de Martínez, aunque la situación es similar. Actualmente se encuentra dirigiendo a Chivas de Guadalajara y, según los medios locales, la dirigencia le ofrecerá una extensión de contrato –tiene vínculo hasta mediados de 2025-. “No hubo nada”, dijo en conferencia de prensa post partido frente al Monterrey.

El “Mellizo”, en tanto, tendría algunas condiciones para agarrar el desafío. Tras dirigir la selección paraguaya, Barros Schelotto se instaló en Estados Unidos con el objetivo de tramitar la ciudadanía estadounidense. Esta situación provocaría que deba estar instalado por cuatro meses en el país norteamericano, es decir, recién podría llegar a Boca en enero.

Otro de los puntos sería que el DT buscaría tener una relación directa con Juan Román Riquelme sin intervenciones del Consejo de Fútbol y hacerse responsable de la totalidad del fútbol del club de la Ribera.