Andar en bicicleta es uno de los ejercicios más beneficiosos para nuestra salud. Se trata de una actividad de bajo impacto que puede ajustarse a los distintos niveles de ejercicio proporcionando un mayor bienestar físico y mental. Existen distintas maneras de practicar esta disciplina, ya que puede realizarse tanto dentro como fuera de casa, pero ¿cuál es la forma más conveniente de andar en bicicleta?

Por qué la bicicleta fija es uno de los mejores ejercicio para cuidar la memoria

La versatilidad de este tipo de ejercicio ha causado que muchas personas simpaticen con montarse en una bicicleta. Existen distintos distintos de aparatos que pueden adecuarse tanto a nuestra capacidad física como a las condiciones climáticas, como por ejemplo, la bicicleta fija. Este artefacto de gimnasio busca similar el ejercicio aeróbico en una bicicleta convencional y se ha vuelto cada vez más popular en el mercado, ya que es liviana, sencilla de usar y utilizable en cualquier momento.

Los beneficios de utilizar bicicleta fija para nuestra salud

Entre los beneficios de utilizar una bicicleta fija para entrenar, esta puede fortalecer nuestro corazón y pulmones, al mismo tiempo que mejora la capacidad del cuerpo para utilizar el oxígeno. Usar una bicicleta estática con regularidad también puede ayudar a regular la presión arterial alta y mejorar la función respiratoria. Además esta actividad ayuda a tonificar nuestros cuádriceps, pantorrillas y glúteos, por lo que es ideal para quienes desean aumentar la masa muscular de aquellas zonas del cuerpo.

Mientras que una de las ventajas más grandes de la actividad en bicicleta fija es su conveniencia. Este ejercicio nos permite entrenar desde casa y a la vez combinarlo con nuestra capacidad multitarea y mientras tanto, leer un libro o tener reuniones virtuales de trabajo. Por otro lado, entrenar dentro de casa resulta conveniente cuando las condiciones climáticas no son óptimas o cuando nuestra agenda no nos permite dedicar demasiado tiempo a la actividad física.

Las múltiples ventajas de practicar andar en bicicleta al aire libre

Para quienes prefieren quedarse en casa y disfrutar de la comodidad de su hogar, la bicicleta fija puede ser una gran opción. Sin embargo, existen otras maneras de practicar esta actividad como lo es explorar los espacios al aire libre. Un estudio de investigación publicado en el American Journal of Lifestyle Medicine se inclina más por los espacios de la naturaleza y destaca la importancia de tener contacto con estos espacios.

Jay Maddock y Howard Frumkin, investigadores de la Facultad de Salud Pública de la Universidad Texas A&M realizaron un análisis sobre la motivación para hacer ejercicio y descubrieron que la exposición a la naturaleza puede marcar una diferencia significativa a la hora de mantenernos encaminados hacia nuestros objetivos de ciclismo o de acondicionamiento físico general. “Un motivo probable para ello es que los entornos naturales son atractivos e incluso inspiradores en muchos sentidos”, afirma Maddock. Esa sensación de bienestar puede impulsarnos a hacer ejercicio con más frecuencia y durante más tiempo, añade.

Entre los beneficios de andar en bicicleta en espacios abiertos, un estudio un publicado en Scientific Reports analizó los efectos de caminar tanto en espacios interiores como exteriores en 30 participantes y descubrió que tan solo 15 minutos de actividad al aire libre eran más efectivos para mejorar las funciones ejecutivas del cerebro, como el aprendizaje y la memoria. Estar en espacios verdes era aún mejor: los participantes mostraron un mejor desempeño en tareas cognitivas después de caminar por un bosque en comparación con un entorno urbano.

Por último las investigaciones destacan que el ejercicio al aire libre puede reforzar nuestra función inmunológica. Los estudios señalan que existen varios mecanismos para esto, incluida la forma en que la luz solar puede energizar las células T (células inmunes que juegan un papel clave en la lucha contra las infecciones), lo que hace que el sistema inmunológico sea más receptivo a las amenazas.

Finalmente será cuestión de preferencia escoger aquella actividad que acompañe de mejor manera nuestros propósitos y se ajuste a nuestras posibilidades. Combinar ambas actividades para obtener los beneficios de las distintas rutinas puede ser una opción conveniente para potenciar nuestro bienestar.