La ex candidata del Partido Demócrata y actual vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, llamó este miércoles a Donald Trump para felicitarlo por su victoria en las elecciones celebradas ayer, en las que este se impuso por amplia ventaja.
Antes de su discurso, previsto para las 20, la dirigente se contactó con el magnate para reconocer su triunfo cumpliendo así con la tradición estadounidense en la que el perdedor contacta al ganador para reconocer oficialmente el resultado de la elección.
Qué cambios implicará el regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados UnidosDe acuerdo a un asesor, la compañera de Joe Biden indicó que conversó con Trump sobre la importancia de un traspaso de poder pacífico y de ser un presidente para todos los norteamericanos.
¿Cuál fue la clave del triunfo de Trump en Estados Unidos?
Donald Trump volverá a ser presidente de Estados Unidos tras un contundente triunfo electoral sobre Kamala Harris basado en un programa antimigración, proteccionista y políticamente incorrecto que estremece al mundo.
El candidato republicano suma, por el momento, 277 votos electorales (necesitaba 270 para ganar) frente a 224 de su rival, según resultados provisionales.
La prensa internacional asegura que se trata de un triunfo extraordinario al cabo de una campaña en la que fue blanco de dos intentos de asesinato, cuatro inculpaciones y una condena penal.
Como en 2016, la incertidumbre de la noche electoral duró poco. Trump ganó dos de los siete estados claves, Georgia y Carolina del Norte, seguidos de Pensilvania. Wisconsin lo remató enterrando las esperanzas de Harris.
Según una encuesta a boca de urna de NBC News, los latinos y los afroestadounidenses han contribuido al triunfo, votando más por él que hace cuatro años. El magnate logró el apoyo del 45% de los votantes hispanos a nivel nacional en comparación con el 53% de Harris. En 2020 la repartición fue 32% y 65%.
"Hemos hecho historia", proclamó Trump, de 78 años, a sus seguidores en West Palm Beach, Florida, rodeado de su familia, incluida su esposa Melania. "Vamos a ayudar a nuestro país a sanar", añadió el magnate, que logró convencer a los estadounidenses de que los entiende mejor que nadie.
Durante la campaña, el republicano aseguró a sus huestes que va a expulsar a los migrantes en situación irregular porque, según él, "envenenan la sangre" del país. También prometió reconquistar las ciudades tomadas, según él por migrantes, y sellar la frontera con México para asegurarse de que no entren más sin visa. El día de la victoria será el de "la liberación", martilleó.
Todo le salió a pedir de boca porque además de ganar las presidenciales, el Partido Republicano arrebató el control del Senado a los demócratas. Trump incluso presumió de haber ganado el voto popular. Si una vez finalizado el cómputo se confirma, sería la primera vez que un republicano lo consigue en dos décadas.