Meses antes de consagrarse campeón de la Liga Profesional con Vélez, Valentín Gómez, actual zaguero titular de Gustavo Quinteros, estuvo cerca de fichar por Palermo en Italia y de jugar cedido en River Plate. Sin embargo, la transferencia se truncó por un inconveniente detectado en los exámenes médicos, lo que dejó al jugador con cierta desazón por el manejo del club de Núñez.
"Estuve leyendo que yo tenía una buena relación con River, pero no es así. Cuando se cayó el pase, el único que me llamó fue mi papá, después no me llamó nadie", expresó Gómez en ESPN. También señaló: “No está bueno que ocurran esas cosas, un llamado hubiera sido lo lógico. Pero fue lo mejor para todos. En el medio, echaron al entrenador (Martín Demichelis) y lo entendí”.
El plan era que Gómez jugara un tiempo en River y luego regresara a Palermo, equipo donde destacaron figuras como Paulo Dybala y Edinson Cavani. No obstante, los estudios indicaron un problema en el menisco de su pierna derecha. Aunque Gómez aseguró que esto no afectaba su rendimiento, el City Group decidió cancelar la operación de 10 millones de dólares.
Tiempo después, en River surgió la idea de adquirir un porcentaje de su pase por un monto más bajo. Sin embargo, el regreso de Marcelo Gallardo tras la salida de Demichelis cambió el panorama. El "Muñeco" priorizó refuerzos como Germán Pezzella, Marcos Acuña y Fabricio Bustos, dejando fuera al defensor de Vélez.
En paralelo, Boca Juniors mostró interés en el jugador de cara al mercado de verano, pero su entorno insinuó en redes sociales que no sería una opción atractiva.
Gómez habló sobre su futuro
Sobre su futuro, Gómez optó por ser cauto: "Vamos a ver qué pasa. Tenemos un partido muy importante el sábado que vamos a salir a ganarlo (Trofeo de Campeones ante Estudiantes en Santiago del Estero) y después de las vacaciones se verá", aseguró.
Por su parte, el presidente de Vélez, Fabián Berlanga, ironizó en TyC Sports: "Bajó mucho porque dicen que está lesionado, ja. Vamos a pedir 10 millones de euros netos, que es el valor de su cláusula”. Aunque el club pretende venderlo al fútbol europeo, River y Boca siguen atentos a su progreso.