El Gobierno dispuso la eliminación de las triangulaciones que las obras sociales hacían entre los aportes de los trabajadores y las prepagas. A partir del 31 de enero, los aportes de los beneficiarios llegarán directamente a las empresas de medicina prepaga que brindan sus prestaciones, eliminando la intermediación.

Según la Superintendencia de Servicios de Salud, esta medida pone fin a un sistema que desviaba fondos de los beneficiarios y alimentaba “cajas negras”. Así lo establece la Resolución 1/2025, publicada este viernes en el Boletín Oficial, que impactará a más de 1.300.000 afiliados. Con este cambio, se desarticula un esquema que, de acuerdo con cálculos oficiales, representaba un negocio de más de 30.000 millones de pesos mensuales.

La medida se alinea con el Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) 70/23 y los decretos 170/2024 y 171/2024. También complementa la Resolución 3284/2024, que el 1 de diciembre permitió la inscripción de las empresas de medicina prepaga en el Registro Nacional de Agentes del Seguro de Salud. Gracias a esta normativa, muchos beneficiarios ya habían optado voluntariamente por eliminar la intermediación.

Para quienes deseen permanecer en su obra social de origen, el Ministerio de Salud aclaró que tendrán un plazo de 60 días para realizar el trámite correspondiente en la Superintendencia de Servicios de Salud. Luego de ese período, la obra social elegida será la responsable de garantizar la cobertura médica.

Desde el Gobierno aseguran que esta reforma busca terminar con décadas de irregularidades en la triangulación de aportes entre obras sociales y empresas de medicina prepaga. Además, destacan que los beneficiarios dejarán de financiar costos innecesarios, lo que implicará un ahorro en sus aportes.