Los humanos amamos los abrazos, es nuestra principal forma de demostrar afecto. Así damos por hecho que nuestras queridas mascotas también los prefieren. Pero resulta que los perros pueden ser un poco más antipáticos respecto a este gesto ya que, en realidad, estos odian los abrazos. 

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La experiencia científica demostró que los perros no comparten el mismo lenguaje afectivo que los humanos. Aunque los abrazos sean una práctica instintiva y llena de significado para las personas, para los peludos, desafortunademente, es solo un gesto sin sentido que muchas veces puede malinterpretarse. 

Un lenguaje diferente

Los humanos y los caninos hablamos diferentes idiomas y utilizamos distintos comportamientos para comunicarnos. Así es que abrazar a un perro creyendo que será una muestra de cariño puede ser malinterpretado, y someter a abrazos puede estresarlo e incluso provocar una mordedura. 

Desde la American Kennel Club (AKC), una de las sociedades caninas más relevantes a nivel mundial, sugieren que debemos prestar atención a las interacciones de afecto entre los perros y notaremos que no abarzan. Es posible que se inmovilicen contra el suelo, pero solo en uno de dos contextos: pelea de juego o pelea real. Por lo tanto advierten que, cuando abrazas a un perro, no entiende lo que intentas decirle.

En realidad, estos creen que los estamos atrapando. Según la AKC, no pueden escapar de nada que los asuste o los haga sentir incómodos mientras están en tus brazos. Y como los abrazos suelen ir acompañados de miradas directas y de poner nuestra cara junto a la del perro, también pueden interpretar estas acciones como agresivas o amenazantes. No es de extrañar que no disfruten de la sensación de apretón de un abrazo.

Evidencia científica

Aunque a algunos perros no parece importarles, la mayoría de los perros muestran señales de estrés cuando los abrazan, y sus dueños no se dan cuenta. El Dr. Stanley Coren realizó un estudio de investigación en el que analizó 250 fotografías de personas abrazando a sus perros. Aunque las personas sonreían y estaban felices, el 81 por ciento de los perros mostraban signos de estrés en su lenguaje corporal.

¿Cómo sabes si tu perro disfruta de verdad de tus abrazos?No mostrará ningún signo de estrés o incomodidad. Es necesario aprender a leer el lenguaje corporal de los perros para poder reconocer su estado emocional y entender lo que intenta decir. Algunas señales de estrés en los perros, como gruñir o mostrar los dientes, son obvias. Pero otras son más sutiles como lo son la rigidez, las orejas bajas, la cabeza girada hacia el otro lado, los bostezos que señalan agotamiento o la cola escondida. 

¿Cómo enseñarles a tolerar los abrazos?

Existen maneras de enseñar a los perros a tolerar los abrazos. Esto es fundamental por razones de seguridad, así como también para ayudar a preparar a nuestro perro para los abrazos inesperados de extraños o niños bien intencionados.

Comenzá por combinar el contacto con golosinas u otra recompensa, luego aumentá lentamente la invasividad hasta que logre contenerlo suavemente. Finalmente, incrementá la firmeza del abrazo, todo mientras continuas recompensando a tu perro después de cada abrazo. Con el tiempo, tu perro soportará incluso el abrazo más incómodo para tener la oportunidad de ganar una recompensa.